En lo nacional andamos mal, pero en "La Nacional" se está muy bien.
"La Nacional" es una insigne cantina de Monterrey. Se halla en un sitio de mucha tradición, la esquina de Madero con Carvajal y de la Cueva, y tiene una barra espléndida, de aquellas de antes, y una contrabarra cuyo inventario requeriría seis despachos de contadores públicos. La gente que ahí trabaja es gentilísima, y las viandas que se sirven son dignas de figurar en los libros de Brillat-Savarin.
En ese precioso recinto nos juntamos la noche del pasado martes a recordar a Lalo González "El Piporro". Fuimos convocados por Felipe de Jesús Chapa, dueño y señor del sitio, y por los buenos amigos de "La Quincena", entre ellos Mario Valencia, compañero de ayer en luchas universitarias.
Hablamos del Piporro, cantamos del Piporro y reímos con el Piporro. Fue una festiva fiesta, y no una solemne ceremonia, la que hicimos para evocar con su familia a ese querido amigo supuestamente muerto. Vive Lalo. Vivirá para siempre en el recuerdo y el amor.
¡Hasta mañana!...
