“El hombre es el lobo del hombre”.
Esa frase la dijo Thomas Hobbes, filósofo inglés.
No supo ese famoso pensador algo que yo sí sé. Un día los lobos entraron en discordia. Olvidaron la antigua paz en que vivían y se entregaron al odio y al rencor. Lucharon unos contra otros; reinó la envidia entre ellos; en su trato ya no hubo sino mal. Se hirieron con garras y colmillos; murieron unos; otros quedaron mutilados.
Un lobo viejo y sabio dijo entonces:
-No cabe duda: el lobo es el hombre del lobo.
Eso sucedió hace ya mucho tiempo. Pero nunca lo supo Thomas Hobbes. Por eso será injusto quien diga que el filósofo le plagió la frase al lobo.
¡Hasta mañana!...