Durango

Motivante, el orgullo de ser los mejores

A 12 años de su fundación, la escuela Antonio de Juambelz y Bracho se encuentra en los primeros lugares de aprovechamiento

Surgida de una necesidad entre grupos sociales que demandaban espacios educativos, la escuela Antonio de Juambelz y Bracho se ha distinguido con el paso de los años por ser una de las mejores en el nivel de educación primaria, gracias a la entrega de su plantel docente y a la determinación de los alumnos que de ella han egresado y de los que ahora cursan ahí sus estudios.

Entrega, determinación, constancia y la decisión de participar en todos los concursos de aprovechamiento y con el afán de obtener siempre los primeros lugares, el cuerpo docente de la Antonio de Juambelz participa en cuanto torneo o concurso se les pone enfrente, conscientes de que cada uno de ellos constituye un reto que, si no ganan, les ayuda a superarse y es así que la referida escuela es en estos momentos una de las mejores primarias en Durango, según lo presumen sus alumnos y lo avalan los padres de familia.

A partir de su fundación en 1992, la escuela primaria Antonio de Juambelz y Bracho se ha distinguido por un espíritu competitivo entre sus alumnos, logrando así destacar en varias ramas tanto académicas como culturales y deportivas. En la actualidad cuenta con 219 alumnos de primero a sexto grados en el turno matutino; de acuerdo con lo establecido por su directora, Margarita Guzmán Rodríguez, tienen una planta académica de diez maestros, además de personal de intendencia.

ORIGEN

Hace doce años, en el mes de septiembre comenzaron labores en esta escuela primaria, pero el camino no fue sencillo. Guzmán Rodríguez inició un censo escolar en el fraccionamiento Real del Mezquital, Valle Verde y Valle del Mezquital y se obtuvo un padrón de cerca de 65 niños con necesidades de educación de primero a sexto grados.

En un principio, impartían las clases en casas en construcción que les prestaban; ?estábamos dispersos y nuestro recreo lo hacíamos en una cancha de afuera?, narró la Directora.

Luego comenzaron las gestiones para construir un edificio apropiado. ?Estaba como gobernador del estado el licenciado Maximiliano Silerio Esparza y como secretario de Educación el ingeniero Emiliano Hernández Camargo, quienes nos dieron el apoyo incondicional?.

Así, poco a poco, se hicieron de un inmueble conveniente para sus educandos. Como tenían sólo tres salones, un maestro atendía dos grupos; ?en breve construimos y mandaron los seis maestros. Así tuvimos todo el personal completo?, recuerda la docente.

LABOR

Esta escuela ha sobresalido en varias disciplinas como danza, el canto del himno nacional, poesía coral y aprovechamiento, entre otras. De esta forma, cada año quedan dentro de los tres primeros lugares a nivel zona que engloba a 12 escuelas. También concursan a nivel sector.

?Son los deseos de los maestros de que sus alumnos sobresalgan y echarle todas las ganas y sacrificar tiempo y muchas cosas para sacar a los niños adelante, el hecho de ver sus logros?, explicó Guzmán Rodríguez como la principal razón de su espíritu de lucha.

Corriendo por los pasillos y ya casi a punto de escuchar ?Las golondrinas? y emprender la aventura de la educación secundaria está Óscar René Burgos Villalobos, quien declaró que él estudia en este plantel porque le queda cerca de su casa y, además, su hermana también formó parte de la matrícula escolar de la primaria.

?Yo me quise meter a esta escuela, me dejan más o menos tarea, lo que es lo normal. La escuela se mete a muchos concursos que puedes ganar. Yo he concursado en expresión literaria, en hacer exámenes?, comentó el niño para después exponer que todos los maestros son agradables.

SOLICITADA

La demanda para ingresar a primer año es considerable; sólo admiten 35 niños y una cantidad similar se queda fuera. Se les da preferencia a los menores de edad residentes del Real del Mezquital, o bien, que tengan hermanos estudiando en la escuela.

Esto es porque las colonias anexas, como Valle Verde y Valle del Mezquital, ya cuentan con su propios centros educativos. Mayra Guadalupe González Alvarado, alumna de quinto grado, compartió su sentir acerca de pertenecer a esta comunidad infantil.

Explicó que, en su caso, entró a esta primaria porque le queda cerca al lugar de trabajo de su mamá; ?lo que más me gusta de la escuela son mis amigos, los maestros me caen bien. Mi maestra es muy amable?, dijo tras comentar que en ocasiones tienen mucha tarea.

?Hay veces en que sí me canso mucho porque tenemos tarea y debemos estudiar?, indicó con singular gracia Mayra Guadalupe.

OPINIONES

Jesús Alonso Rodríguez Cortés también está en quinto año y su estancia en este plantel obedece a que su tío trabajaba antes como maestro de Educación Física; ?disfruto mucho a mis amigos, mi escuela es muy bonita, las canchas, los maestros?, comentó con una sonrisa.

Para él, la maestra Maritza ha sido la mejor profesora que ha tenido. ?Sabe qué hacer y cuando sale sí nos encarga trabajo y algunas maestras no hacen eso. Lo bueno es que nos encarga mucha tarea toda la semana y los sábados y domingos no nos encarga nada, tenemos días libres?, agregó.

Con su pierna enyesada, el niño manifestó sentirse preparado con los conocimientos que ha adquirido en esta escuela.

Marcela Espinoza Valenciano es compañera de Jesús Alonso y Mayra Guadalupe. En su caso, sus dos hermanos mayores estudiaron en la primaria y ?a su mamá se le hizo muy buena escuela?; por eso, ahora también ella porta el mismo uniforme que sus allegados.

?Creo que es una buena escuela porque tiene muy buenos maestros, está muy bien, está grande. Lo que me gusta de mi maestra es que sabe dar clases y sí nos sabe preparar bien. Yo creo que estoy bien preparada; me comparo con niños de otras escuela y a veces sé poquito más que ellos, pero a veces menos?, comentó, con una sonrisa.

Para Marcela, la Directora es estricta en ocasiones, pero con razón, además de ?muy responsable?; ?me siento muy contenta de estar en esta escuela?, enfatizó la chiquilla.

DIFICULTADES

La maestra con menos antigüedad tiene seis años laborando y, según manifestó la Directora, son un grupo reducido de profesores pero trabajan unidos y toman las decisiones en conjunto. En el presente ciclo escolar se han esforzado por solventar los gastos operativos de la escuela y organizan diversas actividades para generar algunos recursos extras.

Sin embargo, pese a las carencias contarán con la enciclomedia para los alumnos de quinto y sexto grados, es decir, tendrán tecnología de punta con un pizarrón electrónico. De igual forma, para el próximo ciclo escolar esperan tener un red de computadoras con acceso a Internet para optimizar el aprendizaje de los chiquillos.

Pero los felices menores están ajenos a las privaciones y aprovechan su época estudiantil. Cintia Marín Soto Cepeda platicó que la escuela le queda muy cerca y ?hay buen material para estudiar?. ?Me gustan los alumnos que vienen a convivir conmigo y me gusta cómo participan los maestros para contribuir con ella?, señaló.

Desde su punto de vista, los maestros le asesoran para hacer sus trabajos pero todavía no está lista para salir de sexto grado, ya que hay algunos temas de matemáticas que no domina. ?Los maestros son pacientes?, finalizó la niña.

HOMENAJE

Impulsó la educación

La escuela Antonio de Juambelz y Bracho lleva ese nombre en honor del periodista duranguense, pues gracias a la intervención El Siglo de Torreón y El Siglo de Durango que él fundó se evitó la venta de los terrenos destinados a la edificación de la escuela.

Según cuenta la directora del plantel, Margarita Guzmán Rodríguez, el Fondo Nacional para la Habitación Popular (Fonhapo) construyó el asentamiento humano y donaron tres terrenos para la cimentación de planteles educativos. ?En el Gobierno de José Ramírez Gamero, él quiso vender el terreno para que construyeran más casas. Las viviendas se empezaron a construir y los mismos habitantes de la colonia les quitaban las bardas?, dijo.

?Quien se metió en grande a ayudar y salvar este terreno fue El Siglo de Durango; dieron la noticia y estaban dándole seguimiento y eso ayudó mucho a que se pudiera salvar el terreno?, agregó.

?En honor y agradecimiento, por eso lleva esta escuela el nombre de Antonio de Juambelz y Bracho?, finalizó Guzmán Rodríguez.

PETICIONES

Anhelan mejorar

La escuela Antonio Juambelz y Bracho tiene grandes planes:

-La construcción de una oficina para la Dirección.

-Construir una bodega debajo de las escaleras.

-Desean nuevos andadores.

-Prevén un salón de usos múltiples.

FUENTE: Investigación de El Siglo de Durango.

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