FORT MYERS, Estados Unidos (AP).-Una jardinera profesional murió después de ser atacada por un caimán de más de tres metros, que la arrastró hacia un estanque y casi le arranca uno de sus brazos.
Jenie Melsek, de 54 años, fue atacada por un caimán mientras trabajaba en el jardín de una casa en Sanibel Island, frente a la costa de la Florida sobre el Golfo de México. Después de que el animal arrastrara a la mujer hacia el agua, un vecino y funcionarios de la policía tuvieron que hacer esfuerzos tenaces para rescatarla de las mandíbulas del reptil.
Melsek murió durante la operación a la que fue sometida en el Hospital Lee Memorial para tratar una infección causada por las feroces mordidas del reptil. Los expertos dicen que su cuerpo se paralizó debido a la infección.
"Mi madre mostró más coraje que miedo, y nada me podría hacer más orgullosa de ella", dijo Joy Williams, de 29 años. "Ella simplemente me asombró a mí y a toda nuestra comunidad con la lucha que libró", agregó.
La policía mató al caimán de unos 230 kilos, que requirió de seis hombres para cargarlo hasta la orilla.
Melsek es la decimocuarta persona en ser fatalmente atacada por caimanes en la Florida desde que se guarda registro.
La población de caimanes en la Florida en su momento disminuyó al punto de que fue incluida en la lista federal de especies en peligro de extinción.
Desde entonces, su número ha ascendido a tal vez más de un millón en todo el estado, según la Comisión para la Conservación de Pesca y Vida Silvestre. Los caimanes pueden ser muertos durante temporadas de caza dirigidas por la comisión.
