Una columna de tanques, vehículos blindados y todoterrenos apoyados por helicópteros de combate irrumpieron después de medianoche en el barrio.
18 de mayo 2004.
Gaza, (EFE).- Las tropas israelíes mataron hoy martes a al menos 17 palestinos e hirieron a decenas en el barrio de refugiados de Tel al Sultán, al oeste de la localidad de Rafah, que ha sido aislada del resto de la franja de Gaza y donde el Ejército permanecerá por tiempo indefinido.
Una columna de tanques, vehículos blindados y todoterrenos apoyados por helicópteros de combate "Apache" irrumpieron después de medianoche en el barrio, donde continúan sus operaciones de registro casa por casa y donde decenas de personas han resultado heridas.
Los helicópteros lanzaron misiles contra los habitantes del barrio y, según el responsable de los servicios de urgencia de Rafah, Murid Kromb, también abrieron fuego deliberadamente contra las ambulancias.
El único hospital de Rafah, Abu Yusef al Nayar, está desbordado por los ingresos y ha tenido que acoger heridos en la maternidad, dijo a EFE su director, Ali Musa, quien también explicó que necesitan sangre para las operaciones quirúrgicas.
La mayoría de los muertos, que fueron alcanzados por esquirlas de los misiles, son varones y mayores de edad, dijeron fuentes médicas palestinas.
Tropas israelíes hacen agujeros en las paredes de las casas para pasar de una a otra y advierten mediante megáfonos a sus residentes que el que ose a salir a la calle será tiroteado.
El ataque por tierra y aire comenzó poco después de medianoche después de que el gobierno de Israel diera luz verde para la operación contra Rafah, el campo de refugiados palestino más paupérrimo con unos 145 mil habitantes y situado en la frontera de la franja de Gaza con Egipto.
De los 145 mil habitantes de Rafah, 87 mil son refugiados y 17 mil viven en el barrio de Tel al Sultán.
En cuanto se supo que columnas de blindados se acercaban a Rafah, miles de palestinos abandonaron sus hogares con sus enseres y documentos de identidad.
"Esto es una guerra real de Israel contra nosotros", dijo el alcalde de Rafah, Saed Zurub, quien explicó que el Ejército de Israel ha cortado la electricidad y el suministro de agua.
"El propósito del Ejército es destruir nuestras infraestructuras. Rafah es el campo de refugiados más pobre en la franja de Gaza y del mundo, llamo a la comunidad internacional para que sea consciente de que si la operación continúa, seremos testigos de una catástrofe humanitaria", aseveró.
Amna Abu Shawesh, profesora de 45 años, relató que la operación le recuerda a las historias que le contó su padre cuando su familia abandonó su casa en Ashdod antes de 1948.
Las mujeres y los niños se han cobijado en los colegios abiertos por Naciones Unidas, mientras que las mezquitas se encuentran repletas de gente, aseguran miembros de la Cruz Roja Internacional.
Unas 150 casas han sido destruidas por las excavadoras militares desde el pasado viernes, tras la muerte de siete soldados israelíes en Rafah en dos ataques perpetrados por grupos armados palestinos.
El argumento para la demolición de las viviendas en que se ampara Israel es el de ensanchar una corredor de tierra, bajo control israelí, entre la franja de Gaza y Egipto.
Portavoces militares informaron de que el objetivo de la operación tiene por objeto destruir túneles destinados al contrabando de armas y munición y arrestar a militantes de la resistencia palestina.
Israel que ha denominado la operación, "Arco iris en las nubes", con reminiscencias bíblicas, pretende continuar las acciones militares en Rafah por tiempo indefinido, según confirmó el ministro israelí de Defensa, Saúl Mofaz.
Por su parte, la Autoridad Nacional Palestina (ANP) ha acusado hoy a Israel de perpetrar "crímenes de guerra" en Rafah y ha instado al Cuarteto de Madrid a que intervenga para que frene las operaciones de castigo del Ejército israelí en esa localidad del sur de la franja de Gaza.
El asesor del presidente palestino Yaser Arafat, Nabil Abú Rudeina, denunció que la operación militar de Israel en el distrito de Rafah está causando una "catástrofe humanitaria".
Numerosos palestinos de Cisjordania están saliendo a la calle en las principales ciudades para protestar por la situación de Rafa y los comercios comenzaron a cerrar sus puertas.
Rafah ha sido objetivo constante de las operaciones militares de Israel en la franja de Gaza y 12 mil 600 personas han quedado sin techo desde el inicio de la Intifada en septiembre de 2000 debido a las demoliciones de más de mil viviendas llevadas a cabo por el Ejército israelí.
Unos 350 palestinos han resultado muertos en Rafah, durante ese período, de los que el 30 por ciento eran menores de edad, informaron fuentes médicas palestinas.