El ataque fue realizado con una granada a propulsión.
24 de mayo de 2004.
Londres, (EFE).- Dos británicos murieron esta mañana en un atentado perpetrado en las cercanías de la "Zona Verde" -el barrio de la capital iraquí donde se encuentra la sede de la administración estadounidense-, confirmó hoy el Ministerio de Asuntos Exteriores del Reino Unido.
"Dos nacionales británicos han sido asesinados" en Irak, se limitó a decir una portavoz del Foreign Office, sin aportar más detalles.
Las víctimas, que no han sido identificadas, perdieron la vida en un ataque cometido a unos cincuenta metros de la entrada de la sede de la coalición en la capital iraquí.
El atentado dejó dos civiles británicos muertos y otras dos personas que se cree son iraquíes.
Desde Bagdad, fuentes militares estadounidenses dijeron que cuatro personas murieron al explotar un vehículo a la entrada de la llamada "zona verde" de Bagdad, a escasos 500 metros de distancia de la entrada del cuartel general de la coalición en Bagdad, donde se encuentra la Autoridad Provisional y el Consejo de Gobierno Iraquí.
El vehículo formaba parte de una caravana de carros civiles blindados, de los que habitualmente transportan a personal contratado por compañías privadas de seguridad.
La explosión del vehículo a la entrada de la "zona verde" se produjo en la misma zona donde la semana pasada ocurrió el atentado contra el presidente en turno del Consejo de Gobierno Iraquí (CGI), Ezzedim Salim.
Testigos en la zona indicaron que el vehículo que estalló era blindado, sin que pudieran precisar si era o no estadounidense.
Según los mimos testigos, el vehículo formaba parte de una caravana de coches civiles blindados, de los que habitualmente transportan a personal contratado por compañías privadas de seguridad.
En esta misma zona, la pasada semana ocurrió el atentado que acabó con la vida del presidente del Consejo de Gobierno iraquí, Ezedín Salim, y de varios de sus acompañantes.
En tanto, otras tres personas, entre ellas un niño, murieron al estallar un artefacto casero justo antes del paso de un convoy estadunidense en el barrio Zaun, en el este de Bagdad, según reportes de prensa conocidos en esta capital.
En otro hecho, dos militares estadounidenses perecieron a causa de una explosión al paso de su convoy en una carretera cercana a la ciudad de Falluya, a unos 50 kilómetros al oeste de Bagdad, informaron fuentes de la coalición.
Asimismo, cuatro explosiones ocurrieron este lunes de forma simultánea en cuatro cines de la ciudad de la norteña ciudad de Mosul, sin que hasta el momento se reporte si hubo víctimas, según fuentes policiales iraquíes.
La violencia también continuó este lunes en el barrio chiíta Sadr City, donde 18 iraquíes murieron y 13 resultaron heridos esta madrugada en enfrentamientos entre milicianos chiítas y las fuerzas estadunidenses.
La víspera, un total de 32 iraquíes fallecieron y 54 fueron heridos en enfrentamientos en una mezquita entre el Ejército estadunidense y partidarios del clérigo chiíta Muqtada al Sadr en la ciudad de Kufa, bastión de estos últimos.
Según un balance del Ministerio iraquí de Salud, más de mil iraquíes han muerto y más de dos mil han resultado lesionados desde el pasado 5 de abril cuando comenzaron los combates entre las fuerzas de la coalición y los milicianos chiítas.
Las tropas de Estados Unidos lanzaron una ofensiva contra los milicianos chiítas tras el asesinato y mutilación de cuatro contratistas estadunidenses, ocurrida una semana antes.
Estados Unidos intenta detener a al Sadr para que sea juzgado por el asesinato de otro importante clérigo chiíta, Abdul Mayid al Joi, ocurrido en abril de 2003, además intenta destruir a su milicia de unos 10 mil hombres.