Jerusalén, Israel.- Una mujer que estuvo casada durante cerca de 20 años se divorció de su marido, al que acusó de "traidor" por no revelarle que era un agente secreto del Servicio de Seguridad, el Shin Bet, y por ello demandará ahora al Estado.
"Estaba estupefacta. No podía creer que me hubiese ocultado algo así", dijo la mujer, madre de siete hijos y residente en uno de los asentamientos judíos de Cisjordania, en los que operaba su esposo para detectar a extremistas peligrosos entre los colonos.
La mujer pidió el divorcio por considerar que al descubrir las actividades de su marido interpretó ese hecho "no sólo como una traición personal, sino también contra nuestro camino ideológico y político" como colonos militantes, informa este lunes la prensa local.
Por tanto, tras el divorcio, se propone demandar al Shin Bet, que opera en Israel y en los territorios ocupados de Cisjordania y Gaza entre judíos y palestinos, por la situación en que ha quedado con sus siete hijos.
La mujer recordó que un mes antes de la boda su marido le preguntó si sería capaz de casarse con un agente del Shin Bet, a lo que ella le respondió que "no".
El jefe de su esposo trató de calmarla cuando descubrió su verdadera identidad diciéndole que "no es un delator" de los colonos, sino que "trabaja para los buenos y evita que incurran en errores que los lleven a infringir la ley".
Hace tres años, el agente del Shin Bet se volvió violento con ella y con los niños, por lo que decidió pedir el divorcio, y al presentar la demanda por alimentos, averiguó que el mario cobraba un salario como agente de ese organismo, por lo que "el Estado debe indemnizarme por casi 20 años de sufrimientos".
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