BUFFALO, EU.- Todo está listo para que Mike Mularkey sea el próximo entrenador de los Bills de Buffalo, que quieren recuperar su condición de equipo ofensivo dentro de la Liga Nacional de Futbol Americano (NFL).
Después de una reunión con el dueño de los Bills, Ralph Wilson, Mularkey, aceptó la oferta y la misión de convertirlo de nuevo en ganadores.
Mularkey, quien antes era el coordinador de ataque de los Acereros de Pittsburgh, era uno de los últimos tres candidatos para la posición junto con Dick Jauron, el ex-entrenador de los Osos de Chicago, y Charlie Weis, el coordinador de ataque de los Patriotas de Nueva Inglaterra.
La elección final de Mularkey se dio en base por las buenas relaciones de trabajo anteriores con el gerente de los Bills, Tom Donahoe, y por su filosofía de ataque estelar.
Mularkey jugó en la NFL entre 1983 y 1991 para los Vikingos de Minnesota y los Acereros y fue el entrenador de la Universidad de Concordia en 1993 antes de ser un asistente con los Bucaneros de Tampa Bay y luego en Pittsburgh.
Los Bills consideraron un entrenador con experiencia después de despedir a Gregg Williams, quien antes era un coordinador de defensa para los Titanes de Tennesse, después de tres campañas, pero necesitaban a un experto en el juego ofensivo.
El ataque de los Bills en 2003 bajo el coordinador Kevin Gilbride terminaron en el trigésimo lugar en la liga después de haber finalizado en undécimo lugar el año pasado.
Los Bills anotaron solamente 243 puntos, segundo total más bajo en la historia de la franquicia y ocurrió un año después de que registraron 379 puntos.
El mariscal de campo veterano Drew Bledsoe también tuvo problemas este año al registrar 11 pases de anotación contra 12 intercepciones y logró 300 yardas en solamente un partido en su peor campaña completa desde 1995.
Mularkey ayudó a los mariscales de campo Kordell Stewart y Tommy Maddox en Pittsburgh al hacerlos efectivos y la clave para que los Bills en 2004 vuelvan a se ganadores es que Bledsoe recupere su condición de líder.
El equipo de Buffalo mejoró su defensa en el 2003 con muchas adquisiciones y terminó en segundo lugar en la NFL en esa categoría, pero los problemas con el ataque hundieron la campaña.