La creación del Instituto de Medicina Genómica y el debate, a nivel internacional, sobre la clonación de seres vivos llevó a pensar que ese tipo de clonación se realizaría en el país.
04 de mayo 2004.
México, D.F. (Notimex).-Ningún sustento científico hay en las opiniones de quienes se oponen a la creación del Instituto Nacional de Medicina Genómica aprobado por el Congreso la semana pasada, sino sólo creencias religiosas e ideológicas, coincidieron expertos en las áreas de la investigación genética.
Ricardo Tapia, coordinador de la Red de Medicina Genómica de la Academia Mexicana de Ciencias (AMC), aseguró a quienes han manifestado su oposición al Instituto que "ningún científico que se precie de serlo en México y en el mundo está pensando en hacer investigación reproductiva ni clonación de seres humanos", como sostienen la Iglesia y otros grupos conservadores como Provida.
Juan Pedro Laclette, integrante del consorcio promotor del Instituto, indicó que son respetables las opiniones de quienes se oponen al funcionamiento y realización de investigaciones en ese campo, pero consideró que "se hacen por falta de información. Las declaraciones que hizo el cardenal (Norberto Rivera) nada tienen que ver: la clonación de tarjetas se refiere a la copia de las mismas, mientras que la clonación biológica es distinta y los científicos mexicanos hemos expresado una postura clara en contra de ello".
Los científicos aseguraron que los trabajos que se realizarán en el Instituto están orientados al tratamiento de células para encontrar soluciones a enfermedades como el alzheimer, la diabetes, la cirrosis hepática y hasta el tratamiento de quemaduras de la piel.
Ricardo Tapia, Premio Nacional de Ciencias y Artes, hizo un reconocimiento a los integrantes del Congreso de la Unión, ya que aseguró tanto los senadores como los diputados escucharon la voz de los especialistas, con lo que la creación del Instituto Nacional de Medicina Genómica permite a México "no llegar tarde a la investigación en este tema".
Durante la conferencia de prensa realizada en El Partenón, sede de la Academia, el investigador del Instituto de Fisiología Celular de la Universidad Nacional Autónoma de México informó que la decisión de las autoridades de salud de apoyar la creación del Instituto respalda la postura que asumió México durante el foro mundial que se realizó en la sede de la Organización de las Naciones Unidas, en noviembre del año pasado.
En aquel encuentro a iniciativa de Costa Rica y Estados Unidos se propuso establecer una moratoria de dos años para seguir la discusión sobre ese tema y contar con mayores elementos para tomar una decisión en torno de prohibir la clonación de las células troncales o células madres con fines reproductivos.
La propuesta fue aprobada por 80 votos en contra de 79 y 15 abstenciones, refirió el investigador; y ahí "el voto de México fue decisivo. De tal manera que sería incongruente que si México votó en contra ahora estuviera buscando, en una ley y con un Instituto, aprobar la clonación de seres humanos".
Juan Pedro Laclette, director del Instituto de Investigaciones Biomédicas de la UNAM, indicó que la relación entre la creación del Instituto y el debate, a nivel internacional, sobre la clonación de seres vivos "es lo que creó la confusión entre diversos grupos, pero aquí debemos entender que todas las posiciones son respetables, hay que analizarlas y si se dan son por falta de información y esa es nuestra labor, aportar opiniones de los expertos calificados".
Incluso, propuso realizar una jornada de información y discusión para que se pueda establecer la diferencia entre lo que es la clonación con fines terapéuticos y la que tiene propósitos reproductivos.
