12 de enero de 2004.
México, (Notimex).- La estrategia electoral del Partido de la Revolución Democrática (PRD) 2004-2005 no descansará en la popularidad de Andrés Manuel López Obrador, adelantó la dirigencia nacional de este instituto político.
Luego de presentar la propuesta de estrategia electoral 2004 que deberá ser aprobada por el consejo nacional en febrero próximo, dirigentes del PRD admitieron que llegan al partido vientos favorables "desde el Zócalo" para el 2006, pero admitieron que la prioridad es este año.
En rueda de prensa, su secretario general, Carlos Navarrete, aclaró que con esta estrategia pretenden sentar las bases para ganar las elecciones del 2006 ante un Partido Revolucionario Institucional (PRI) fracturado y un Partido Acción Nacional (PAN) desprestigiado.
En su opinión hay condiciones para que haya una segunda alternancia política en el país, por eso el PRD tiene que sentar las bases desde ahora, trabajar por su unidad en su organización en estos años.
En su propuesta de estrategia electoral 2004, los dirigentes destacan como eje estratégico ocho puntos que les permitirá un mejor posicionamiento.
Según su análisis, el PRD se propone en entidades como Puebla Tamaulipas, Aguascalientes, Yucatán, Chihuahua, Baja California y Durango elevar su nivel de competitividad.
También iniciará una campaña nacional de comunicación que posicione al partido y que permita a amplios sectores de la población comprender de mejor manera a esta organización política.
Navarrete dijo que todavía no es tiempo de que su organización política entre al tema de los comités que se están creando en apoyo de López Obrador, ya que dijo en estos momentos todas las energías están enfocadas para las elecciones de este año.
Apuntó que en el PRD se realizará el mayor esfuerzo en toda la historia en estos 15 meses a través de dos mil comités municipales para preparar el terreno para el 2006.
No obstante reconoció que hay mucha simpatía ciudadana y de círculos políticos en pro del jefe de gobierno capitalino, pero no es el momento de la sucesión presidencial.
Insistió en que la alta popularidad de López Obrador es una ventaja para el partido y que hay vientos favorables que vienen desde el Zócalo, "pero la conducción del barco le corresponde al partido".
En su oportunidad, el secretario de acción electoral de este partido, Graco Ramírez, apuntó que la comisión política se reunirá el 30 de enero para conocer la estrategia electoral y adelantó que la unidad será fundamental en la misma.
Adelantó que el PRD apostará a las grandes ciudades y trabajará con mayor fuerza en las comunidades donde no tenga presencia.
Advirtió que su partido está dispuesto a hacer alianzas con otras organizaciones políticas, aunque de entrada advirtió que con el PRI no hay ninguna posibilidad, con el PAN podrían ir en algunos estados, pero con la condición de que el candidato sea independiente o perredista.
Sin embargo adelantó que en el último de las casos podría ser un abanderado panista pero siempre y cuando haya un programa de gobierno de por medio.
