Otra vez los integrantes del PRD están en lo más alto de los periódicos y noticieros por sus acciones recién realizadas el pasado martes. Burlándose de su propia palabra –que vemos que no tienen- Dolores Padierna, diputada federal, la cual tiene por marido al famoso René Bejarano –aquel que aparece en el video recibiendo una generosa “mordidota” de Carlos Ahumada- basándose en engaños consigue el acceso de los asambleístas del Distrito Federal, ante el presidente de la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados Federal, el priista Manlio Fabio Beltrones al área de invitados.
Una vez dentro, la comitiva capitalina tomó por asalto la tribuna y obligó a decretarse un receso, que para efectos prácticos consiguieron su objetivo; impedir la primera lectura del proyecto para la modificación del artículo 122 constitucional, donde se propone obligar al Gobierno capitalino que aporte al igual que lo hacen los 31 estados federados al costo de educación y en la cual por motivos del pasado, la capital del país estaba exenta de contribuir para el gasto educativo.
Como facinerosos que normalmente son, los perredistas que han encontrado en el Distrito Federal, el semillero perfecto para todas aquellas prácticas del viejo sistema que no termina de irse. Ese que gusta de las prebendas obtenidas a base de fuerza y conveniencias políticas que a la razón. Pero los pueblos y en especial el mexicano, no tienen memoria.
Se ha satanizado hasta el cansancio a Carlos Salinas de Gortari, al que es imposible desprenderlo de todo el manto de corrupción que empañó su sexenio, pero es innegable también que trajo a nuestro país aires frescos de modernización, o ¿quién se echó el tiro del Tratado de Libre Comercio? Esto viene a cuento, porque precisamente en la época de Salinas se da el nacimiento del PRD. En aquel entonces, el ala corporativista del PRI, encabezada por Cuauhtémoc Cárdenas, no pudo convivir más con los neoliberales que desde el 82, con De la Madrid, habían tomado el poder del tricolor. También hay que reclamar que esa elección de 1988, aquella en que Manuel Bartlett, entonces secretario de Gobernación, ejecutó el fraude electoral que otorgó el poder a Salinas. Toda esa corriente de retrógradas priistas que coexistían en el monopólico priismo, son la gran mayoría de los integrantes del llamado partido del Sol Azteca. Hay que decirlo también, de repente se pueden encontrar talentos verdaderos de izquierda en medio de esa turba organizada que de vez en vez se dejan ver. Hay en el Partido de la Revolución, personas de calidad y capacidad, proponiendo y colaborando desde su óptica social, al desarrollo de la nación.
Sin embargo, la realidad es que la ciudad de México siempre ha sido una sociedad diferente al resto del país nada más porque goza de una inequitativa tajada del presupuesto federal. En nuestra capital residen miles de funcionarios federales que perciben su nómina gracias al pago de contribuyentes que nada tienen qué ver con ellos y claro, al haber ese ingreso genera un mercado atractivo para todos, esa zona del país crece en parte gracias la subsidio de los provincianos.
Por lo pronto ayer, ahora, los diputados federales del partido del camaleónico “Peje”, logran reventar nuevamente en base a la fuerza, la sesión para la primera lectura de la modificación del 122, nuevamente con acciones de hecho, no de Derecho, logran dilatar el ejercicio democrático que debe llevarse a cabo en la Cámara Baja, legalmente reglamentada.
No se puede soslayar tampoco, que la modificación del 122, obedece al interés del PRI y el PAN de golpear a Andrés Manuel López Obrador, arrebatándole bajo una iniciativa con fundamento sólido, alrededor de cuatro mil millones de pesos que necesitaría redistribuir hacia la educación en el Distrito, pero la pregunta es entonces para los priistas y panistas: si son responsables y equitativos, ¿por qué no concretan la Reforma Fiscal, tan necesaria en estos tiempos que se busca equidad?
Habrá qué ver en qué termina este sainete y si la Cámara aprobará la reforma. De ser así veremos las manifestaciones de politiquería que tanto le gustan a los perredistas.
Teatro Nazas
El sábado pasado tuvimos la fortuna de ver cristalizado en el Teatro Nazas, el esfuerzo de miembros de la sociedad lagunera que en conjunto con el Gobierno del Estado de Coahuila y la participación de tres importantes empresas, le han regalado a Torreón la posibilidad de contar con un gran recinto propio para la expresión cultural. El detalle surgió desgraciadamente de la comunidad torreonense al inconformarse por el nombramiento de una foránea como directora del teatro. Aunque estoy seguro que aquí hay talento, me niego a entender que prevalezcan criterios dispares en cuanto a regionalización se refiere. Por un lado, hay quejas de que la directora del Teatro Nazas no es de aquí, pero bajo ese criterio: ¿Cuántos entrenadores locales ha tenido el Santos Laguna? La “Banana” Ortiz y ¿quién más? Digo, si traemos algo o alguien de afuera es para mejorar o ¿cómo le hubiéramos hecho para conformar La Camerata?, porque muchos de ellos no son tampoco de acá.
eirazoqui@elsiglodetorreon.
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