18 de febrero de 2004.
MEXICO, D.F., (SUN-AEE).- Andrés Manuel López Obrador, jefe de gobierno del Distrito Federal, dio el pésame a los familiares de José López Portillo y rechazó hacer algún comentario sobre la gestión del ex presidente de México.
Dijo que a la ciudadanía le toca hacer la valoración del trabajo del ex mandatario. "No me gusta dar opiniones cuando se trata de alguien que fallece porque no es correcto y es de mal gusto", puntualizó.
Durante su conferencia de prensa matutina, López Obrador rechazó hacer algún comentario o pronunciamiento sobre las pensiones de los ex presidentes de México, sobre todo porque no es el momento para hacer críticas.
Desde el año pasado, el tabasqueño criticó las pensiones que reciben los ex mandatarios. López Portillo comentó en varias ocasiones su enfado por estas opiniones.
Se deslinda de salida de Medel
Por otra parte, en su conferencia de prensa matutina, López Obrador aclaró que nunca influyó o intervino para que saliera José Medel del Sindicato Unico de Trabajadores del Gobierno del Distrito Federal (SUTGDF). "Yo no estoy acostumbrado a tirar la piedra y esconder la mano", señaló.
Dijo que es un asunto de principios el no intervenir en la vida interna de los sindicatos, por lo que desmintió los comentarios de Medel en el sentido de que interfirió para su salida.
"El es libre y tiene derecho, como todos, a expresarse y manifestarse, pero en mi gobierno nunca se intervendrá en la vida interna de los sindicatos y mucho menos se impulsará a otros personajes", insistió.
Medel acusó a López Obrador de tener injerencia directa en su salida de esa organización.
Dijo que para llegar al cargo pactó con él y con el dirigente de la Federación de Sindicatos de Trabajadores al Servicio del Estado (FSTSE), el senador Joel Ayala. A principios de mes, sin embargo, Medel salía por exigencia de los 40 secretarios generales seccionales.
El secretario de Gobierno capitalino, Alejandro Encinas, también cuestionó la versión de Medel sobre la supuesta injerencia del gobierno capitalino para que fuera removido.
Medel fue sustituido el pasado 3 de febrero por Enrique Hanff Vázquez, después de cuatro meses de conflicto y de ser acusado de presuntas irregularidades en el uso de recursos sindicales.
El punto más impugnado fue que autorizó el pago con vales de despensa, en lugar de efectivo, por lo que 63 delegados, de un total de 117, aprobaron destituirlo del cargo.
Medel acusó a su sustituto de ser cuñado del presidente del Partido de la Revolución Democrática (PRD) capitalino, Agustín Guerrero, y formar parte de las 11 secciones que el gobierno capitalino tiene bajo su control, a través del director de Relaciones Laborales, Miguel Angel Vázquez.
