Normas de calidad
agroalimentaria
Para aquellas personas prestadoras de bienes o servicios es conveniente que sometan sus productos a un control de calidad idóneo a fin de acrecentar sus ventas y tener la posibilidad de vender en el extranjero.
La normalización es la actividad orientada a establecer un proceso mediante el cual se unifican criterios respecto a determinados temas y se posibilita la utilización de un lenguaje común en un campo de actividad determinado.
El vínculo económico con los mercados internacionales obliga a elevar los niveles de seguridad de los productos y servicios, facilitando así, las actividades comerciales globales y el incremento de grado de competitividad en el mercado exterior.
El resultado de la normalización se plasma en un documento técnico, a través del cual productores, prestadores de servicios, consumidores, importadores, instituciones de educación superior e investigación científica, usuarios, colegios de profesionales y personal técnico de las dependencias relacionadas con la materia, establecen las características que debe reunir un productor o un servicio.
La expansión del ejercicio de la normalización está constituida por la NORMA, la cual es definida por ISO (International Organization for Standardization) como: ?Especificación técnica, accesible al público, establecida con la cooperación y el consenso a la aprobación general de todas las partes interesadas, basando en los resultados conjuntos de la ciencia, la tecnología y la experiencia, que tiene por objetivo el beneficio óptimo de la comunidad y que ha sido aprobado por un organismo calificado a nivel nacional, regional o internacional.?
El campo de actividad al que puede hacer referencia una norma, es tan amplio, como la diversidad de productos y servicios que se encuentran en el mercado.
La redacción de una norma supone la participación, dentro del Comité Consultivo de Normalización correspondiente, de todos los implicados en la producción, uso y disfrute del objeto que se normaliza.
Debido al perfeccionamiento constante de la tecnología, las normas oficiales mexicanas deben adecuar su contenido técnico a los cambios tecnológicos que se produzcan, por lo que deben ser analizadas y revisadas periódicamente.
Es importante mencionar, que el proceso de modernización no termina con la simple publicación de las normas, pues el proceso carecía de valor, por tal motivo es esencial que éstas sean implementadas y evaluadas.
En este sentido, las normas establecen un criterio objetivo que debe tener un producto o servicio, al definir la seguridad, durabilidad, fiabilidad, mantenimiento e intercambiabilidad.
Cabe señalar, que cuando las normas contienen especificaciones orientadas a proteger la seguridad de las personas, de los animales, de los vegetales, del medio ambiente general y laboral, adquieren un carácter de obligatorias en la legislación de muchos países.
Las normas oficiales mexicanas tienen como propósito la transparencia, armonización y homologación de especificaciones con base en los estándares elaborados por los organismos internacionales como la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación, la Organización Mundial de la Salud, el Codex Alimentarius y la Oficina Internacional de Epizootias.
En el ámbito de la producción de alimentos y productos agrícolas y pecuarios, la normalización orientada a la preservación de la sanidad vegetal y animal se ha convertido en un factor relevante, a efecto de regular el intercambio de dichos productos a nivel mundial, esto con el objeto de preservar de esta manera la salud humana, que son los criterios que sirvieron de base para los tratados internacionales que ha celebrado nuestro país.
Es por ello que usted ha visto que en la promoción de productos alimenticios, por ejemplo se hace mención de la Norma Oficial Mexicana que hace referencia por la calidad del producto y encontrará también en la propaganda de muchos artículos las leyendas ISO-9000, ISO-14000, etc., esto quiere decir que estos productos han pasado por un control de calidad estricto y se asegura su comercialización incluyendo exportación a otros países.
Es muy conveniente que al comprar algún producto o bien solicitar un servicio, éstos sean de calidad, por lo que debemos fijarnos en estos controles y no comprar o solicitar un servicio de mala calidad que a la larga repercute en nuestra economía.
