Los vecinos de las colonias Francisco Pérez Ríos, José Campillo Sainz, Valle del Nazas y Fraccionamiento Santa Rosa, en Gómez Palacio, volvieron a vivir horas de zozobra.
En la llamada zona industrial se registró un incendio que provocó, por igual, incertidumbre, temor y una gran movilización de los cuerpos de socorro.
Pero el incidente es sólo, uno más. En esa zona operan Pemex, CFE, una planta de arcilla, plantas tratadoras de mármol y hasta una planta procesadora de alimentos.
La contaminación y el riesgo son elementos con los que deben vivir cotidianamente los habitantes de esa populosa zona de Gómez Palacio.
Los vecinos recuerdan la explosión del poliducto cuando a unos kilómetros de la planta “ordeñaban” el combustible; ponderan el hecho de que sufren de ese hollín que emana de la instalación de la CFE, aún cuando opera a su mínima capacidad. El polvo de las tratadoras de mármol se disputa los honores en cuanto a malos olores, con las emanaciones de la procesadora de alimentos para pollos.
A lo que deben agregar esas lagunas que forman las aguas residuales que genera “la capital industrial de La Laguna” en el lecho seco del río Nazas.
Alto precio deben pagar por el progreso. Lo único que no entienden los vecinos es porqué ninguna autoridad hace algo por elevar los niveles de seguridad, de vigilancia y sobre todo de respeto a la ecología y dignidad humana, para que el desarrollo industrial no signifique, por necesidad, peligro y contaminación.