LOS TIEMPOS del paternalismo quedaron atrás, dijo el presidente Vicente Fox hace unos días. El pueblo ya no debe esperar soluciones mágicas o dádivas. Pero esto no significa que quien detenta el poder puede desentenderse de sus obligaciones. Y la gente demanda empleos.
Sucede lo mismo en el plano regional. A pesar de que el balance es positivo, los empresarios de la Comarca Lagunera aclaran que aún hay tareas pendientes: la falta de inversión es el principal reclamo hacia los gobernadores y alcaldes de la Comarca.
Los representantes de la Iniciativa Privada aseguran que no pueden recordar ninguna empresa grande que se haya instalado en la región, y esto les preocupa. Decir esto no es decir poco, pues un área que atrae pocas inversiones acarrea otros males como el aumento en los niveles de desempleo y de delincuencia.
Este reproche no sólo encuentra eco en el sector empresarial, más bien parece una demanda generalizada. En un sondeo practicado por El Siglo de Torreón, los ciudadanos enarbolan la falta de empleos como reclamo principal ante el gobernador de Coahuila, Enrique Martínez. En segundo lugar destaca el no acercamiento a los municipios, lo que llama la atención en un Gobierno estatal que se afana en difundir sus logros por todos los rincones del país.
También al mandatario saliente en Durango, Ángel Sergio Guerrero Mier, se le señala la necesidad de crear empleos. Destaca después -según las respuestas- el incumplimiento de sus promesas de campaña y el poco acercamiento a los municipios.
A nivel ayuntamientos, los ciudadanos de Torreón, Gómez Palacio y Lerdo mencionaron también el desempleo entre los tres puntos débiles de los respectivos alcaldes. De Guillermo Anaya, en Torreón, y de Rosario Castro, quien asumirá el mando en Lerdo, los ciudadanos dijeron esperar el cumplimiento de las promesas de campaña.
Atrás quedaron los tiempos del paternalismo, es cierto. Pero cuando la exigencia prioritaria es la atracción de fuentes de trabajo, no hay pretextos que valgan para no cumplir. Implícita en el reclamo va la intención ciudadana de esforzarse para salir adelante en el plano individual, y por ende, nacional. Queda en las autoridades escoger si son factor de freno o de impulso ante este empuje.
