Sao Paulo, (EFE).- Un mendigo que dormía en una calle de Sao Paulo fue asesinado, en un caso al parecer sin vínculos con una ola de ataques a personas sin techo en la mayor urbe brasileña que ha dejado seis muertos y diez heridos en la última semana.
La policía informó de que el cuerpo de un mendigo fue encontrado en una calle en el barrio de Vila Guilherme, en el norte de Sao Paulo, y al parecer fue víctima de una pelea con otra persona que dormía en la misma región.
Pese a que no descartaron la posibilidad de que esta muerte esté vinculada a los otros homicidios, los investigadores dijeron que en esta oportunidad el crimen ocurrió lejos del centro de la ciudad y que el arma utilizada fue un cuchillo.
Los otros ataques, ocurrieron en pleno centro de Sao Paulo y los agresores golpearon a sus víctimas en la cabeza con objetos metálicos o de madera.
Las autoridades sospechan de que los ataques fueron obra de una banda organizada que actúa movida por prejuicios raciales o sociales, o instigada por comerciantes que quieren expulsar a los indigentes del centro de la ciudad.
El mendigo aparentaba tener entre 40 y 50 años, primero fue acuchillado y después pateado repetidamente con la intención, según la propia policía, de confundir a los investigadores.
"Es preocupante que los crímenes se conviertan en moda", afirmó el diputado Romeu Tuma, miembro de una comisión de legisladores regionales creada para acompañar las investigaciones.
Además de los casos de Sao Paulo, otros dos mendigos fueron asesinados en el estado de Pernambuco (nordeste) por hombres que los tirotearon desde un vehículo en marcha.
La policía sospecha de que estos dos homicidios fueron cometidos por una banda de "exterminio" que actúa en la ciudad de Recife, capital de Pernambuco, y que ya es investigada por otros ataques a personas sin techo.
