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MÉXICO, DF.- Las acusaciones que el gobierno de México hiciera al embajador cubano Jorge Bolaños Suárez el pasado dos de mayo quedaron en el olvido.
En la embajada de Cuba en México, luego de su arribo al Distrito Federal, el diplomático expresó su satisfacción por estar de regreso para cumplir su responsabilidad ante el pueblo y gobierno mexicano.
“Hago llegar mi sincero agradecimiento y aprecio a todas las mexicanas y mexicanos que desde los diferentes rincones de este país me obsequiaron muy generosamente, con inolvidables muestras de cariño y confianza, que desde la distancia me hicieron que me sintiera aquí junto a ustedes”.
Jorge Bolaños, quien fuera acusado por el gobierno de México de tener injerencia en asuntos internos y fuera expulsado el dos de mayo pasado, dijo que ahora su labor consistirá en esforzarse “sin pausas y con la misma lealtad y entrega de siempre en favor de las relaciones entre nuestros países”.
“Al hacerlo no sólo cumplo con la satisfacción y responsabilidad el mandato expreso de mi gobierno sino también con la voluntad soberana de mi pueblo, hermano mexicano”.
Después de su breve pronunciamiento fue abordado por los representantes de los medios de comunicación y se le interrogó respecto de en dónde quedan las acusaciones que el gobierno de México le hiciera, a lo que respondió que todo ya se había dicho el domingo pasado durante la conferencia conjunta del secretario de Relaciones Exteriores, Luis Ernesto Derbez y del canciller cubano Felipe Pérez Roque.