Roma, (EFE).- Un equipo médico de la ciudad italiana de Florencia ha logrado operar con éxito a una niña de diez meses que tenía las piernas unidas en una extraña malformación denominada sirenomelia, por su semejanza con las sirenas.
La operación se realizó hace tres meses, durante los cuales los médicos han constatado que el resultado de la intervención a la conocida en Italia como niña-sirena "es positivo", informaron medios italianos.
La incidencia de esta extraña enfermedad es de 0.8 casos por cada cien mil nacimientos y normalmente los bebés que la padecen no sobreviven debido a los daños que sufren los órganos vitales.
"Ahora la niña se encuentra bien" aseguró el responsable de cirugía del Hospital Meyer, Antonio Messineo, aunque reconoció que de momento es pronto para saber si podrá caminar porque todavía tiene los pies deformados hacia fuera.
No obstante, los cirujanos confían en que dentro de uno o dos años la pequeña pueda moverse por sí misma, a pesar de que "es difícil hacer predicciones ya que no existen muchos casos como éste", añadió.
Messineo explicó que la bebé tenía unidas las articulaciones inferiores y tan sólo los dedos de los pies estaban separados, pero "por fortuna los vasos vasculares eran dobles", indicó, con lo que la intervención de microcirugía pudo terminar con éxito.
Uno de los mayores riesgos de la operación, que se prolongó durante siete horas, era la eventual aparición de una necrosis en la zona de los pies, algo que por fortuna no ocurrió, según el doctor.
Ahora la niña-sirena deberá someterse a fisioterapia y no se descartan nuevas intervenciones quirúrgicas para solventar futuras complicaciones en las piernas, en los pies y en el aparato uro-genital.
Los expertos aseguran que la paciente está "feliz y contenta" y no descartan que pueda tener un aparato genitourinario normal, con la posibilidad incluso de que llegue a ser madre.
Hasta ahora sólo se habían realizado en el mundo otras tres intervenciones como la que se ha llevado a cabo en Florencia, aunque todos los pacientes fallecieron antes de alcanzar la edad de cinco años.
El equipo médico que operó a la pequeña estaba formado por expertos del Hospital Universitario Meyer, el policlínico Careggi y el Policlínico Sanitario Asl, todos ellos de Florencia.