EFE
MADRID, ESPAÑA.- La Justicia española dictó ayer órdenes internacionales de busca y captura contra cinco marroquíes y un tunecino por su presunta relación con los atentados del pasado día 11 en Madrid.
Los seis sospechosos, cuyas fotografías difundió el Ministerio español del Interior, son los hermanos Rachid y Mohammed Oulad Akcha; Abdennabi Kounjaa, alias “Abdallah”; Sarhane Ben Abdelmajid Fakhet, alias “El tunecino”; Jamal Ahmidan, conocido como “El chino” y Said Berraj.
Varios de los apellidos de los sospechosos coinciden con los de algunos de los detenidos hasta el momento en relación con las acciones terroristas del 11 de marzo, que causaron 191 muertos.
En concreto, los apellidos Oulad Akcha son los mismos que los de Naima, la única mujer arrestada por ahora, y de Khalid, quien quedó en libertad por esta causa después de declarar ante el juez y que fue devuelto a la cárcel en la que cumple condenado por otros delitos.
También fueron detenidos los primos Said y Hamid Ahmidan, el primero de los cuales quedó en libertad, mientras que al segundo se le imputó un delito de colaboración y Abdelouahid Berraj, a quien la justicia señaló como uno de los supuestos autores materiales de la matanza.
Por otra parte, el juez de la Audiencia Nacional encargado del caso del 11-M, Juan del Olmo, acordó ayer mantener en situación de detención judicial e incomunicada hasta el viernes al español Antonio Toro Castro, cuñado del ex minero José Emilio Suárez, quien está acusado de suministrar los explosivos para los atentados.
El magistrado decidió mantener la detención de Antonio Toro a la espera de una serie de diligencias, que fuentes jurídicas calificaron de muy importantes.
Según las fuentes, Del Olmo decidió dejar en libertad al marroquí Mustafa Ahmidam, quien declaró que trabaja en un bar y que no tiene mucha relación con su hermano Jamal, uno de los seis sospechosos para los que el juez ha dictado órdenes de detención internacional.