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MÉXICO, DF.- Con un sombrero blanco como capote, Enrique Bunbury salió a ?torear? al público que no dudó en comprar un boleto desde dos meses antes para ver a su intérprete favorito.
A las afueras del Teatro Metropólitan, todo era nerviosismo entre las chicas que esperaban con emoción el momento en que el español saliera al escenario y las conquistara con una nota o con un movimiento cadencioso.
Los hombres también demostraron que cuando se trata de ser fanático ellos no escatiman, así que no hizo falta aquél que se levantó el cabello con crepé y gel para adoptar el look de Bunbury. El sombrero que el español eligió para la portada de su más reciente disco fue el accesorio de moda entre los asistentes, quienes ya tenían memorizadas las canciones que se dieron a conocer hace sólo unas semanas.
Enrique salió al escenario vestido con traje sastre color blanco y zapatos combinados. Su rostro cuidado como siempre y su cabello rizado, que esta vez fueron cubiertos por un sombrero. El recibimiento fue efusivo cuando a las 20:30 horas apareció en el escenario del Metropólitan.
El Anzuelo, Señorita Hermafrodita y Los Restos del Naufragio fueron los primeros temas que se escucharon en el teatro repleto de fans. La euforia se desató cuando el español saludó a la concurrencia y anunció su siguiente tema: ?Gracias por venir, bienvenidos a El Viaje a Ninguna Parte. Esta canción nos nació porque cuando andamos de gira, de un lado para otro y llegamos a Estados Unidos siempre nos sentimos fuera de casa?, dijo.
El Extranjero fue la canción que sus músicos ejecutaron con un vestuario que sólo remontaba a las carpas de circo. Mientras el pianista, con la cara pintada de payaso, se secaba el sudor, Bunbury mostraba a las jóvenes algo más de su cuerpo. Él se retiraba el saco y el teatro se llenaba de gritos.
El cantante demostró que no está desconectado de lo que sucede en el mundo, por lo que también dedicó una canción a los políticos mexicanos.
?Ustedes saben todas estas cositas que suceden aquí con el PAN, el PRI y el PRD. No sé si a alguno de los presentes le interese dedicarse al negocio que nunca se acabará, la política; pero, por si alguno se apunta, les voy a dar una gran lección?, comentó Bunbury.
El tema Que no Sepa tu Mano Izquierda lo que Hace la Derecha fue coreado, con dedicatoria a los gobernantes. Para rematar, una paloma blanca salió en la pantalla gigante que estaba al fondo del escenario, la cual sirvió para que el español arrancara lágrimas con El Viento a Favor, canción que pide no perder la esperanza porque el peor momento indica que el bueno viene en camino.
Luego de deleitar a los fans con gran parte de sus éxitos, Bunbury abandonó el escenario, pero los gritos lo hicieron regresar tres veces.
El Jinete, de José Alfredo Jiménez, fue de las canciones más coreadas por el público, pero la emoción se desbordó cuando La Chispa Adecuada hizo que el cantante se reencontrara con su época en Los Héroes del Silencio.
Con esta canción en tono de balada y con un tema peruano titulado Canto, Bunbury paró el contoneo de su cuerpo y se hincó ante el público para despedirse del recital, el cual se repetirá dos días más en el mismo sitio.
TABLA DE DATOS
AGRADECE DE RODILLAS
El cantautor español Enrique Bunbury quedó tan sorprendido por la efusividad del público, que al término de la actuación se arrodilló en el escenario para agradecer su cariño.
-El Teatro Metropólitan, donde tendrán lugar los tres recitales de este intérprete, estaba abarrotado y los fanáticos del artista español, integrante del desaparecido grupo de rock Los Héroes del Silencio, no se cansaron de demostrarle su cariño con aplausos y gritos.
-El zaragozano, de 37 años, estuvo acompañado por ocho músicos y coros, los cuales estaban ataviados a la usanza circense.
-El intérprete realizará 11 presentaciones en México, las cuales estarán divididas en dos partes: la primera entre el 24 de julio y 21 de agosto, cuando visitará los estados de Morelos, Aguascalientes, Querétaro y Puebla, entre otros, y la segunda parte la realizará en noviembre.
Después de una primera retirada, Bunbury regresó en dos ocasiones al escenario para despedirse de su público, ante el que terminó hincado como símbolo de agradecimiento.
FUENTE: EFE
