México, (EFE).- El avistamiento por la Fuerza Aérea de México de misteriosos destellos en el cielo ha sembrado la polémica y el temor de las autoridades de que el caso de los supuestos "platillos voladores" adquiera excesiva importancia.
En marzo pasado, once objetos volaron durante diez minutos junto a un avión militar mexicano, primero alineados, después rodeándolo y al final haciendo bruscos y rápidos virajes hasta perderse en la distancia.
Las imágenes de estas apariciones grabadas por las cámaras infrarrojas del avión, difundidas públicamente el lunes, han generado una controversia y la inmediata reacción de la Secretaría de Defensa, que aclaró que en ningún momento afirmó que se trataran de aeronaves espaciales.
"Yo prohibí estrictamente que se hablara de un ovni y de platillos voladores porque ahí comienzan las dudas y choteos, que conmigo no van", afirmó a la radio el secretario de Defensa, general Gerardo Clemente Vega.
Pero aclaró que decidió hacer pública la grabación realizada en el cielo del estado sureño de Campeche para que los "expertos" investiguen el asunto.
El vodeo con las imágenes -el primero de este tipo que se hace público en México- fue suministrado en abril al ufólogo y periodista mexicano Jaime Maussan, quien lo hizo llegar a la cadena Televisa.
Ahora Maussan se queja de que científicos enterados del asunto por la televisión hayan desechado a priori la posibilidad de que el fenómeno se trate de un registro de "vida inteligente" ajena a la humana.
"Me da miedo que la apertura demostrada por los militares al consentir la difusión de estas imágenes pueda cerrarse por la posición irracional de la comunidad científica", afirmó Maussan a EFE.
Algunos investigadores señalaron a la prensa que los registros de energía, que aparecen como manchas blancas, pueden tratarse simplemente de un meteorito "que se fragmentó al entrar en la atmósfera".
Otra posibilidad barajada es que sea "basura espacial" derivada de satélites que al cumplir su ciclo de vida caen en la atmósfera.
Maussan puntualizó que lo que el avión detectó son "objetos no identificados", lo que no implica afirmar que son extraterrestres tripulando platillos volantes, aunque calificó el avistamiento suficientemente inquietante como para ser investigado.
El secretario de Defensa explicó que el avión militar estaba intentando localizar aeronaves que entran a territorio mexicano con cargamentos de droga cuando detectó "esas cuestiones luminosas".
"En la secretaría lo estuvimos analizando y había dos caminos: archivarlo o entregarlo a una persona que sabe de esto, para que pudiera hacer uso de ello en sus trabajos y difundirlo sin alarmar a nadie", dijo.
El funcionario descartó que la difusión de las imágenes con los supuestos ovni pretenda "distraer la atención" sobre los problemas nacionales.
"Nosotros no nos prestamos a ese tipo de cosas, porque si no, lo que ocurre es que la próxima vez (un caso similar) se clasifique como secreto", advirtió.
Y recalcó que lo único de lo que informó la dependencia a su cargo es del "avistamiento de puntos muy raros e incomprensibles en esa situación", aunque descartó que "esto pueda ser considerado un asunto de seguridad nacional".
En México se han detectado supuestos fenómenos parecidos cerca del volcán Popocatépetl (centro del país) y en la Sierra Madre Oriental.
Maussan, que se queja de ser tratado de "loco", afirmó que el hecho de que los objetos aparecieran por detrás del avión para después rodearlo y la velocidad a la que se movían -más de 500 kilómetros por hora- echa por tierra las hipótesis de los científicos.
En la grabación los pilotos muestran su sorpresa por lo que ven.
"Mira, ahí van, hay cinco, seis, no, son ocho", dice uno de los militares a bordo del avión, que es replicado por un compañero con la exclamación: "¡Qué barbaridad, eh, y van a una velocidad!".
