Regreso
Te alejaste de mí con paso firme,
arrogante, soberbio y orgulloso
en ese instante yo sentí morirme,
y tú ibas muy feliz, lleno de gozo.
Pasó el tiempo que nada nos perdona,
ahora vuelves vencido por la vida
y yo tengo en mi frente la corona
de la dicha y la paz, ya no hay herida.
Otro hombre me dio dicha y ternura,
que tú con tu partida me negaste
y borró con sus besos la amargura,
que al irte de mi lado me dejaste.
Ya no te puedo amar aunque quisiera,
sólo puedo sentir piedad por ti
se acabó tu radiante primavera
muy tarde regresaste junto a mí.