Tristeza
Me siento triste hoy y no sabría,
precisar el motivo de mi pena;
y siento que se aumenta mi agonía,
al escuchar la dulce melodía
con que tú ensalzas la belleza ajena.
Quisiera ser hermosa cual ninguna,
y ser sabia y alegre, dulce y fuerte,
y que me diera a mí, Dios la fortuna,
de poder entregarte, una a una,
las horas de mi vida hasta la muerte.
Me siento triste hoy porque comprendo,
que pronto has de alejarte de mi lado,
y seguiré en la vida siempre viendo,
la imagen de tu rostro que sonriendo,
se alejara de mí, mi bien amado.
Me siento triste hoy pero qué importa,
si ahora tú me estrechas en tus brazos,
al fin y al cabo que la vida es corta,
y si se rompen del amor los lazos,
como en última ofrenda vida mía,
te obsequiaré mi alma hecha pedazos.