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MÉXICO, DF.- Cerca de 900 mexicanos ganaron una demanda de 3.2 millones de dólares a la empresa estadounidense DeCoster Egg Farms, luego de que ésta fue acusada por discriminación, malas condiciones de vivienda y de trabajo en sus fábricas en el estado de Maine.
La Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) informó que los demandantes y demandados alcanzaron un acuerdo extrajudicial que fue aprobado por la Corte Federal del distrito de Portland, Maine.
Esta no es la primera vez que la empresa estadounidense pierde una demanda presentada por mexicanos; en el 2002, 13 connacionales también ganaron una millonaria demanda a la empresa que se dedica a la crianza de gallinas y producción de huevo.
DeCoster Egg Farm ha pagado, desde 1997, poco más de 2 millones de dólares en multas que le han sido impuestas por el alto riesgo que representan sus instalaciones para los trabajadores, así como por las malas condiciones de higiene.
Esta empresa emplea por lo regular a trabajadores que carecen de documentos y un estatus migratorio ilegal. De acuerdo con el Departamento del Trabajo de Estados Unidos, las instalaciones de la empresa dedicada a la producción de huevo han sido calificadas como peligrosas y opresivas.
"El miedo y la intimidación mantuvieron a estos trabajadores en una atmósfera insegura, malsana y antihigiénica", comentó el Departamento del Trabajo.
Las fábricas de DeCoster ubicadas en Iowa y que se dedican a la producción de porcino han sufrido la misma situación al ser demandadas también por personal femenino que alegan un mal trato, además de acoso sexual.
DeCoster en Iowa ha pagado multas por 229 mil dólares debido a acusaciones de generación de problemas ambientales, demandas que ha encabezado el estado al clasificar a la empresa como "violadora habitual".
La empresa estadounidense ha sido calificada por jueces y funcionarios estatales como "abominable, atroz, peligrosa, deplorable, negligente y opresiva", entre otros.
La cancillería mexicana, a través del consulado de México en Boston, fue también codemandante de la empresa y ayudó al asesoramiento de los connacionales afectados.
"El gobierno de México considera que esta decisión sin duda constituirá un importante precedente jurídico en futuras demandas laborales, a efecto de asegurar el respeto de los derechos humanos, civiles y laborales de los mexicanos que residen y trabajan en Estados Unidos, independientemente de su calidad migratoria", manifestó la SRE en un comunicado de prensa.
