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MÉXICO, DF.- La selección olímpica de futbol viajó ayer rumbo a París, en donde iniciará el camino hacia la cita en Atenas 2004.
El grupo de futbolistas partió con el sinsabor y la inconformidad de no haber llegado a un acuerdo respecto a los premios que otorgará la Federación Mexicana de Futbol (FMF) en caso de conseguir medalla en el evento.
El mediocampista Luis Ernesto Pérez aseguró: "No estamos en total acuerdo con lo ofrecido, se nos hizo poco, y esperamos seguir en pláticas en cuanto lleguen los directivos a la concentración".
Incluso, explicó que no existe fecha programada para reanudar las conversaciones, "ni siquiera sabemos cuándo podremos platicar con ellos", dijo en referencia a los directivos de la FMF, Alberto de la Torre y Decio de María, quienes tuvieron un acercamiento con cuatro miembros del equipo en el inicio de la semana.
Pérez, uno de los encargados en las negociaciones, explicó que sólo ha tenido una charla y pidió a sus compañeros paciencia para resolver la situación económica.
Sin embargo, dejó en claro que no adoptarán ninguna medida, porque ellos pasan su motivación en el aspecto deportivo.
Aseguró que "sólo hemos pedido premios por llegar a las finales y obtener medallas, pero lo que nos ofrecieron nos parece un porcentaje bajo".
Informó que en cuanto a los viáticos todo quedó arreglado.
Mientras tanto, Ismael Rodríguez, zaguero del conjunto sub-23, también lamentó que no se resolvieran los premios previo a este viaje y apuntó: "No nos parece suficiente, porque se gana más por un título en México que por una medalla de oro en Juegos Olímpicos, lo cual sería algo único".
Los negociadores en la selección -Luis Ernesto Pérez, Antonio Naelson “Zinha”, Diego Martínez e Israel López- esperan, sin embargo, resolver favorablemente las diferencias.
Por otra parte, el grupo tuvo la ocasión de estudiar a Malí, que será el primer rival al que enfrentarán el 11 de agosto, y al respecto, Ismael Íñiguez hizo ver que se trata de un adversario que sabe jugar al futbol y que se encuentra bien conjuntado.
El propio Íñiguez reportó un esguince de tobillo del cual espera restablecerse en territorio europeo.
El delantero Rafael Márquez también mostró su respeto por los contrincantes a los que se medirán en Atenas e incluso observó: "Serán adversarios de otro nivel -dijo al compararlos con los componentes del preolímpico- y eso también cuenta, es una bonita prueba".
Arropado por un grupo de aficionados que le pedían autógrafos, Márquez señaló que a todos los que ahora le animan, anhelan devolverles estas muestras de cariño con una medalla.
Más breve fue el incorporado Antonio Naelson “Zinha”: "Vamos por una medalla, tenemos la mentalidad para lograrlo".
El seleccionado tricolor debió arribar a las primeras horas de este día a París, se trasladará de inmediato a Roma donde el próximo cinco de agosto enfrentará a un rival de la localidad aún por definir y el siete de este mes se trasladará rumbo a Atenas para estar listos de cara al debut, el miércoles 11 ante Malí en Volos.