El gobierno chino a comprometido todo su apoyo a los Juegos de Pekín y los del 2008 podrían ser no solo los mejor organizados, sino también los más competitivos de la historia.
28 de agosto de 2004
ATENAS (AP) .- A los dirigentes del Comité Olímpico Internacional les costó conciliar el sueño en los años previos a los Juegos Olímpicos de Atenas a raíz de demoras en las obras y otras complicaciones que hicieron temer que la capital griega no pudiese montar la justa. En los próximos cuatro años, la gente del COI seguramente podrá dormir tranquila.
El gobierno chino a comprometido todo su apoyo a los Juegos de Pekín y los del 2008 podrían ser no solo los mejor organizados, sino también los más competitivos de la historia.
"Se están preparando como para una guerra", comentó el funcionario del comité olímpico estadounidense Bob Condron.
La cuenta regresiva para Pekín 2008 comenzará el domingo, cuando el alcalde de la ciudad reciba la antorcha olímpica durante la ceremonia de clausura de Atenas 2004. La ceremonia incluirá una presentación de ocho minutos en el que se establecerá un vínculo entre la antigua Olimpia y la Gran Muralla china.
La presentación la dirigirá el cineasta Zhang Yimou, director de películas como "Sorgo rojo", "El farol rojo" y "Héroe".
China quiere demostrar que pondrá todo su empeño en organizar unos juegos exitosos. Y es bien sabido que, cuando los chinos se proponen hacer algo, no se anda con vueltas. China, después de todo, construyó la Gran Muralla.
Y hace poco remodeló sus principales ciudades, sacrificando barrios enteros para dar cabida a autopistas de seis carriles y rascacielos.
En 1958 puso en marcha un plan de industrialización mal concebido con tanto fervor que 40 millones de personas murieron de hambre.
Ahora, luego de dos décadas de transición en los que dejó de ser un estado socialista cerrado y se encamina a convertirse en una superpotencia económica en un mundo globalizado, China quiere usar los Juegos Olímpicos para demostrar que la nación más poblada del mundo es una fuerza naciente, y no solo en el deporte.
"Los juegos serán una especie de vehículo para demostrar que China se está abriendo" al mundo, dijo el secretario general del comité organizador de la justa Wang Wei. "China es el país en desarrollo más grande, la economía que crece a ritmo más acelerado, y los juegos gozan de un gran respaldo en China".
Para el estadounidense Condron, "esta es la fiesta de presentación más grande de la historia".
Para que los juegos sean un éxito, China considera que todo debe salir a la perfección.
En marcado contraste con Grecia, que completó las obras apenas días antes del inicio de la justa, China proyecta tener todo listo dos años antes. Su gobierno lanzó una enorme campaña de propaganda para crear consciencia de la importancia de estos juegos e incluso está modificando algunas leyes para complacer el COI.
"Si uno necesita un millón de personas para terminar un estadio, hace una llamada y las tiene al día siguiente", afirmó Bud Greenspan, un cineasta que filma documentales olímpicos y que ha trabajado estrechamente con los chinos.
La población china, por otra parte, se muestra entusiasmada con los juegos, al punto de que más de un millón de personas presenciaron el paso de la antorcha por China en junio, en su recorrido hacia Atenas.
"La atmósfera que hubo fue espectacular. Imagínese lo que va a ser cuando se inauguren los juegos", expresó Wang.
El gobierno recientemente modificó sus proyectos y demoró un año la culminación de las obras a pedido del COI, que generalmente tiene que apurar a la gente para que se terminen los estadios, pero en esta ocasión debe decirle a los chinos que no se pasen de revoluciones.
China no solo quiere sobresalir en la parte organizativa, sino también en el aspecto deportivo y puso en marcha un ambicioso plan de formación de deportistas con miras a destronar a Estados Unidos como la máxima potencia olímpica.
"Su programa es el más grande de la historia", dijo Condron. "Podrían barrer con las medallas".
China participó en 14 de 28 deportes en Sydney. En Atenas, lo hizo en 26. Y el objetivo en el 2008 es estar en todas las disciplinas, con deportistas capaces de ganarlas.
He Huixian, vicepresidente del comité olímpico chino, dijo que su país está entrenando a fondo a deportistas en especialidades en las que los chinos no se destacaban, como la natación y el atletismo.
Como parte de este plan, muchos deportistas de cierta edad fueron sacrificados en Atenas para dar paso a promesas más jóvenes, que llegarán fogueadas a los juegos del 2008.
Steve Roush, alto funcionario del comité olímpico estadounidense, visitó China en junio y se mostró asombrado por el nivel de chicos de 9 y 10 años en las escuelas para deportistas.
"Tienen un talento notable para chicos de esa edad. La disciplina, el talento y la cantidad de chicos que tienen es impresionante", indicó.
Wang dijo que es fundamental que los atletas del país sede se destaquen para que los juegos sean un éxito.
"Si al equipo de la casa no le va bien, no hay buen ambiente en los juegos", sostuvo Wang.