ELECTRICIDAD | ES VIGENTE EL PROBLEMA PESE A LAS ACCIONES DE LA CFE
En cualquier punto de la ciudad puede haber tomas clandestinas.
EL SIGLO DE TORREÓN
Torreón, Coah.- Pese al programa permanente de detección de uso ilícito de energía eléctrica, las tomas clandestinas o no registradas, son un problema vigente en la Comarca Lagunera y en cualquier parte del país, declaró Rodolfo Alcalá Moya, superintendente de la Comisión Federal de Electricidad en la Región Lagunera de Coahuila.
El problema, destaca, se tiene en todo el mundo con la energía eléctrica, ya que se facilita por el hecho de que la red está en la vía pública y hay personas que se “cuelgan”.
Reconoció que puede ocurrir en cualquier punto de la ciudad y el medio rural, es por ello que la CFE mantiene un programa permanente de detección de usos ilícitos del fluido eléctrico.
Las personas que toman lectura de los medidores en los domicilios particulares y establecimientos comerciales o industriales, explicó, vigilan también que no haya tomas clandestinas y cuando las descubren, se procede en consecuencia.
Cuando se detecta una toma clandestina, la CFE acerca al usuario para que se regularice y de alguna manera se puede calcular desde cuándo se encontraba en esa situación para hacerle un ajuste en el cobro.
El servidor público reconoció la dificultad de cuantificar las pérdidas por el concepto de robo de energía eléctrica, dado que hay pérdidas naturales en la red misma y es por eso la supervisión constante.
Desde personas muy humildes, hasta dueños de algún negocio son tentados a hacer uso indebido de la energía, pueden ser norias de uso agrícola, doméstico o algún establecimiento, incluso se han detectado en colonias residenciales.
Hay muchos trucos para intervenir el medidor, pero en todos los casos hay que violar el sello y es como el empleado de la CFE se percata, aunque hay otros casos de tomas en los cables que bajan de la red al medidor, antes que lleguen a éste, aunque siempre queda huella.
Podría darse el caso también de empleados desleales en la CFE, dijo, pero serían pocos, pues hay mecanismos para detectar también esas anomalías.
Privatización
La Comisión Federal de Electricidad (CFE) es propiedad de la Nación, es una empresa que no persigue lucro y al privatizarse habría que ver en qué condiciones y qué precio fijarían los particulares, declaró Rodolfo Alcalá Moya, superintendente regional.
Tras reconocer que es un tema complejo, dijo que mientras sea de la Nación y no persiga lucro, el precio estará regulado y calculado, considerando diversos factores económicos.
La energía eléctrica, expuso, es un insumo insustituible para el desarrollo del país y el servicio que presta es muy importante. El costo se mantiene por el mínimo, pues siempre hay un subsidio en apoyo a usuarios domésticos.
Al privatizarse, analiza, habría que estudiar qué condiciones y variables se tomarían en cuenta para fijar las tarifas. La tarea de la Comisión Federal de Electricidad es brindar un servicio sin lucro, en tanto que siendo privada cambiaría el objetivo.
En la actualidad, precisó, el 85 por ciento de los usuarios es de tarifa doméstica, tienen subsidio gubernamental y varía dependiendo de los bloques de energía que se consumen, pero hay cantidades muy fuertes subsidiadas y eso desaparecería.
Los costos de producción, añadió, son variables y dependen de cómo se genere y qué tanto se tenga que transportar desde los centros de generación a los de consumo.
“Al yo poner mi negocio busco siempre ganar lo máximo posible, o sea, a cómo me dejan vender, a cómo me pueden comprar y ahí entraría el estira y afloja; qué tanto puedo subir mis precios, aumentar las ganancias y qué tanto me regule la Nación”, concluyó Alcalá Moya.
