Nosotros Las palabras tienen la palabra VIBREMOS POSITIVO Eventos

Personajes de la historia / Familia zacatecana radicada en Torreón

Desde hace 49 años, don Juan de la Torre Robles hijo de don Jesús de la Torre Gamboa y Claudia Robles Correa, y María de la Torre Reveles de De la Torre, hija de don Marcelo de la Torre y doña Lupe Reveles.

Don Juan y doña María nacidos en Juanchorrey, Tep. Zacs., vivieron de niños en Kansas City, Estados Unidos. Juan nació el 23 de mayo de 1915 y María el 20 de marzo de 1920. Ambas familias regresaron de los Estados Unidos a Juanchorrey, Zacatecas donde vivieron su juventud.

Yo recuerdo a María cuando era quinceañera, pues yo tenía diez años. Ella era amiga de mi hermana Agustina, de mis tías María y Enriqueta de la Torre, de Lazarita y María de la Torre, de Clara Ortiz y otras jóvenes que en la época de ?aguas? de junio a septiembre disfrutaban de los campos floridos de la Sierra del Alamillo, La Obra, El Venado, San Antonio, San José y otros.

Los bajíos se cubrían de morados girasoles que inclinaban sus corolas hacia donde estaba el Sol. Las lagunas de ?las masas?, del pozo, Grande y del caballo, derramaban sus cristalinas aguas hacia las barrancas. Las encinas se cubrían de hermosos lirios y sirloches. Las muchachas cantaban románticas canciones y a escondidas veían a los novios.

Mi primo hermano Juan, diez años mayor que yo, era apuesto y varonil, María era muy bonita. Se hicieron novios y se casaron en Tepetongo, Zacs., el 27 de abril de 1938 y procrearon diez hijos: Jesús, José, Tobías, Juanita, María Guadalupe, Tomás, J. Trinidad, Daniel, Fernando y María Inés de la Torre de la Torre.

Juan se dedicó a la carpintería y al comercio y en una época difícil, a finales de la década de los cincuentas se vinieron a radicar a Torreón, trabajando, primero, una tortillería que yo había comprado por la calle Once, después tuvo un comercio por la avenida Hidalgo, luego otro en Gómez Palacio y finalmente compró a unos chinos una tienda de abarrotes en la esquina de Allende y Galeana, donde trabajó hasta su retiro.

Durante varios años yo lo visitaba una o dos horas los sábados, hablando de libros, de gentes, del terruño, de fechas que si no recordábamos, María, con su privilegiada memoria, nos sacaba de dudas. Juan fue un gran lector, autodidacta, que llegó a ser un sabio en historia, filosofía, religión, etc., don Juan murió el 24 de octubre de 2002 en una tarde lluviosa y fría. Doña María el seis de enero de 2004, también, como coincidencia, en una tarde lluviosa y fría, mientras nos congelábamos, las áridas tierras laguneras se tonificaban.

Al fundarse la Diócesis de Torreón por el Papa Pío XII, el 13 de enero de 1958, nombró su primer Obispo al Dr. don Fernando Romo Gutiérrez, quien llegó a Torreón el 19 de abril del mismo año enmedio de un gran recibimiento que le brindó el pueblo lagunero. El nuevo Obispo ante la carencia de sacerdotes para cubrir las necesidades de su jurisdicción, solicitó del Obispo de Zacatecas que le proporcionara dos presbíteros. Le concedieron el traslado de los teólogos Jesús y Tobías de la Torre, que fueron ordenados por el Obispo Romo Gutiérrez: A Jesús el 19 de abril de 1966 y a Tobías el 27 de diciembre de 1927. Ambos cantaron su primera misa en su natal Juanchorrey. Jesús fue nombrado por el Señor Obispo como encargado de comunicación social. Así comenzó su carrera periodística y televisiva que perdura hasta la fecha.

En el sepelio de doña María el siete de enero de 2004, su nieto Alfonso, hijo de Lupita, entre otras cosas dijo: ?Falleció mi abuelita en la tarde del Día de Reyes y la noticia nos cayó de sorpresa a todos, pero así son estas cosas, imprevistas. Tranquilamente ella se despidió del mundo, sola, tal como vino y nos deja un gran vacío que nadie podrá llenar...?. Tenía la capacidad moral como para aconsejar a un sacerdote, sus regaños y consejos eran inobjetables ya que provenían de su sabiduría ganada por la experiencia.

Mujer sencilla, de gustos sencillos y aunque le gustaban las cosas buenas y las conocía, inteligentemente nunca ambicionó más de lo que Dios le dio... ?...Mamá, dijo el padre Jesús en la segunda misa del triduo, con su prodigiosa memoria nos enseñó a valorizar el tiempo de nuestra convivencia familiar. Papá siempre haciendo apuntes, guardando recortes y consultando a mamá para precisar los datos... En la altura de un piso 25 del Hotel Torre del Moro de Mazatlán, apenas hace un mes, mamá me dijo muchas veces aquella noche: ?Yo quise mucho, mucho a tu papá, jamás le desobedecí. Él me quiso mucho. Era un gran hombre, cantaba muy bonito, bailaba muy bien... Papá escribía mucho y a su muerte mamá se apegó a los libros de papá como un gran tesoro. Tanto que le leía papá de historia, de Biblia, de catecismo, de chistes, etc. Todo esto fue fuente para la memoria vivísima de mamá... ?Descanse en paz?.

Leer más de Nosotros

Escrito en:

Comentar esta noticia -

Noticias relacionadas

Siglo Plus

+ Más leídas de Nosotros

LECTURAS ANTERIORES

Fotografías más vistas

Videos más vistos semana

Clasificados

ID: 69984

elsiglo.mx