Reuters
CARACAS, VENEZUELA.- La oposición venezolana, que en la víspera sufrió un nuevo revés en su campaña para revocar el mandato al presidente Hugo Chávez, afirmó ayer que apelará a la comunidad internacional y profundizará la presión en las calles para deshacerse del militar retirado.
Los adversarios del Presidente de discurso izquierdista, que desde el viernes han protagonizado violentos choques callejeros con militares que arrojaron al menos seis muertos y unos 75 heridos en confusos tiroteos, aseguran que avalaron su petición de referendo revocatorio con 3.4 millones de firmas ante el Consejo Nacional Electoral (CNE).
Pero en una decisión que era esperada desde el mes pasado, las autoridades electorales dijeron el martes que preliminarmente la oposición sólo recogió 1.83 millones de firmas válidas de las 2.4 millones requeridas para activar el referendo.
“Bajo esa condición, que se olvide (el CNE) que vamos asistir a ese proceso de reparos”, advirtió ayer Timoteo Zambrano, representante de la oposición.
La oposición, que dice que no negociará las firmas con el CNE, espera que la autoridad electoral rectifique su decisión. “No aceptamos los reparos (...) porque están tratando a los venezolanos como delincuentes”, dijo el diputado Carlos Ocariz.
“Aquí la gente no se va a entregar, la gente va a seguir en la calle para seguir presionando para que nuestros derechos no sean vulnerados como el CNE lo anunció ayer”.
La oposición prevé presentar un recurso de reconsideración ante el propio CNE y acudir al Tribunal Supremo de Justicia para que “una vez que se agoten los recursos internamente en el país entonces acudamos a la justicia internacional”, dijo en una entrevista de radio el parlamentario Andrés Velásquez.
“Si el Gobierno cree que concluyó con esto se equivoca, ahora es cuando viene conflictividad, ahora es cuando viene ingobernabilidad”, agregó.
Hoy jueves la oposición tiene previsto realizar una protesta, sobre la cual aún no han dado detalles, para anunciar los próximos pasos contra el Gobierno de Chávez, a quien acusan de ser autoritario y querer implantar un Gobierno comunista como el cubano.