16 de enero de 2004.
BAGDAD, (AP).- El comandante de las fuerzas de ocupación estadounidenses en Irak, el general Ricardo Sánchez, pidió el viernes a los simpatizantes de Saddam Hussein que abandonen la lucha "y acepten el futuro" en un Irak soberano, indicando que de lo contrario, terminarán muertos o capturados.
El ejército estadounidense dijo que ha tenido gran éxito en controlar la insurgencia en la región central de Irak desde la captura de Saddam el 13 de diciembre. "Seremos implacables en la persecución de esos objetivos", dijo el teniente general Ricardo Sanchez en una conferencia de prensa.
Pero la violencia continuó al estallar el viernes una bomba al costado de una carretera hiriendo a dos niños. La explosión ocurrió luego que soldados estadounidenses se acercaron a un artefacto sospechoso para inspeccionarlo. No se informó de bajas entre los soldados.
Dos bombas halladas en el Ministerio de Defensa también fueron desactivadas el viernes por soldados estadounidenses, dijo el teniente Robert Cornetius. Pacientes fueron evacuados de parte de un hospital frente al ministerio, dijo el viceadministrador del hospital, Imad Tarek.
Sanchez dijo por su parte que los ataques diarios contra tropas de la coalición han descendido a unos 15 al día, comparados con algunas docenas previamente. "El momento es perfecto para que las fuerzas enemigas de la coalición y para ex miembros del régimen adopten una decisión, la de aceptar el futuro", dijo Sanchez. Aquellos insurgentes "que siguen prófugos", añadió, "deberán rendirse".