AGENCIAS
DAMASCO, SIRIA.- Estados Unidos instó ayer a Siria a retirar sus soldados del Líbano y a dejar de interferir en los asuntos internos de ese país.
William J. Burns, subsecretario de estado para Oriente Medio, manifestó además que “Siria debe tomar medidas concretas para cooperar con la guerra contra el terrorismo liderada por Estados Unidos, dejando de apoyar a milicianos palestinos asentados en Damasco e impidiendo la infiltración hacia Irak de combatientes árabes antiestadounidenses”.
“Hemos subrayado nuestra profunda preocupación por la intervención siria en el proceso político libanés, y reiteramos que, de acuerdo con la resolución 1559 del Consejo de Seguridad de la ONU, Siria debe terminar su interferencia en los asuntos internos libaneses, retirar sus fuerzas del Líbano y permitir que las fuerzas y el Gobierno libanés establezcan su autoridad en el Líbano”, expresó Burns a la prensa después de un encuentro de dos horas con el presidente sirio Bashar Assad.
La visita de Burns tuvo lugar cuando las relaciones de Estados Unidos y Siria son tensas y más de una semana después que un dividido Consejo de Seguridad aprobó una resolución demandando a las fuerzas extranjeras que abandonen el Líbano y se realice una elección presidencial para evitar que Beirut siga la política siria y se extienda por otros tres años el mandato del presidente de Siria, Emile Lahoud.
Washington ha impuesto sanciones a Siria a través de una Ley que acusa a Damasco de buscar armas de destrucción masiva y de no hacer lo suficiente para impedir que milicianos crucen hacia Irak para combatir a las fuerzas de la Coalición. Demanda también a Siria que retire sus 20 mil soldados del Líbano.
Siria niega las imputaciones y sostiene que no puede supervisar toda su larga y porosa frontera con Irak. Manifiesta también que el Líbano requiere que sus soldados estén emplazados allí para mantener la paz y la estabilidad después de la devastadora guerra civil que se extendió entre 1975 y 1990.
Assad le dijo a Burns que Siria desea que Irak mantenga su “unidad nacional” y sea un Estado seguro e independiente, de acuerdo con la prensa local. Ambos acordaron “continuar con el diálogo y las consultas... en temas de mutua preocupación”, indicaron.
Exigen poner fin a secuestros
Por otro lado, el ministro libanés de Asuntos Exteriores, Jean Obeid, instó al primer ministro iraquí, Iyad Allawi, a asumir sus responsabilidades y poner fin a los secuestros en Irak.
“Los secuestros cometidos por grupos armados en Irak perjudican a los amigos y hermanos de ese país árabe y facilitan a los ocupantes un pretexto para quedarse en su territorio”, agregó el jefe de la diplomacia libanesa, citado por radios locales.
Entretanto, Líbano espera la llegada de los restos mortales de Georges Badin y Karim y Evelyne Jury, que murieron tiroteados el pasado viernes por un grupo de hombres armados en su residencia de Bagdad.
Badin y Jury habían creado recientemente en Irak, junto a un empresario iraquí, una sociedad comercial de productos alimentarios.
Según las primeras investigaciones, el grupo armado habría intentado secuestrar a los dos hombres de negocios libaneses y a la esposa de uno de ellos, pero la inesperada llegada del chofer hizo que los atacantes abrieran fuego contra los tres libaneses.
En el tiroteo resultó herido un cuarto libanés, cuya identidad no ha sido revelada.
Decenas de empresarios libaneses se trasladaron a Irak tras la caída del régimen del derrocado presidente, Saddam Hussein, en marzo del pasado año, en busca de nuevas oportunidades para sus negocios.
