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MÉXICO, DF.- El Comité Ejecutivo Nacional (CEN) del PAN rechazó haber tenido conocimiento de los videos que involucran a funcionarios perredistas en actos de corrupción.
Asimismo, puntualizó que el senador del Partido Acción Nacional (PAN), Diego Fernández de Cevallos, explicará, cuando la investigación lo permita, en qué términos tuvo acceso a éstos.
A su vez, el secretario general del PAN, Manuel Espino, afirmó que el desempeño político del senador Diego Fernández de Cevallos “tiene que ser revisado desde una dimensión ética, no solamente política o jurídica o a la luz del interés general de la coyuntura que estamos viviendo”.
En entrevista por separado, el secretario de Acción de Gobierno del CEN del PAN, Alejandro Zapata, pidió que se integre una “comisión de la verdad” con personas de reconocido prestigio que investiguen con independencia hasta el fondo el caso de la corrupción del Gobierno del Distrito Federal y de militantes del Partido de la Revolución Democrática (PRD).
También rechazó que el PAN haya conspirado en contra del gobierno capitalino o del PRD, y exigió al jefe de gobierno, Andrés Manuel López Obrador, asumir de una vez su responsabilidad en vez de querer “embarrar al PAN en sus porquerías”.
Los dirigentes panistas dijeron haberse enterado por los medios de comunicación de que Fernández de Cevallos sabía de los videos que muestran la presunta corrupción de perredistas desde antes de su divulgación, y que se reunió el 20 de febrero con el empresario Carlos Ahumada y funcionarios del Centro de Investigación y Seguridad Nacional (Cisen) y de la Procuraduría General de la República (PGR) en un hotel capitalino.
Espino dijo que el PAN no puede estar bajo sospechas por el desempeño de uno de sus militantes, así se trate de un personaje.
Asimismo, senadores del PAN cerraron filas en torno de su coordinador parlamentario.
“Respaldamos a Diego, porque lo difundido está perversamente soportado”, indicó el senador Marco Antonio Adame.
El senador Héctor Larios y el propio Adame coincidieron en que el involucramiento de su coordinador con el empresario Carlos Ahumada es una “bola de humo” para desviar la atención de los actos de corrupción protagonizados por funcionarios perredistas y revelados a través de videograbaciones.
“El conocimiento de los videos no cambia su contenido. El gobierno capitalino hace mal en tratar de desviar la atención de un hecho central: algunos de sus funcionarios son corruptos”, consideró Larios Córdova.
