17 de marzo de 2004.
Bagdad, (EFE).- El Consejo de Gobierno iraquí envió hoy una carta al secretario general de Naciones Unidas, Kofi Annan, en la que alaba el "el papel de la organización en Irak", y le solicita su mediación y ayuda en el proceso político.
"La misiva incluye nuestra estima por el papel de la ONU y (le pide) ayuda para la puesta en marcha de un Ejecutivo de transición y la convocatoria de elecciones", declaró Sami Askari, adjunto al presiente de turno del Consejo de Gobierno provisional iraquí, el clérigo chií Mohamed Baher al-Ulum.
"El Consejo de Gobierno puede así, aprovecharse de la experiencia de la organización", añadió.
Por su parte, Ahmad Chalabi, asimismo uno de los 25 miembros del Consejo de Gobierno, reveló en la misma comparecencia que existe consenso total en este organismo "a favor de un papel de la ONU en Irak".
Sin embargo, fuentes diplomáticas occidentales han asegurado que el denominado frente chií del Consejo de Gobierno se encuentra dividido sobre esa intervención del organismo internacional.
Añadieron que los trece miembros chiíes del Consejo ven la figura de Lahdar Brahimi, el enviado especial de Naciones Unidas a Irak, demasiado cercana a las posturas de lo suníes, corriente a la que este diplomático pertenece.
De igual forma, los chiíes iraquíes le acusan de connivencia con el régimen del depuesto Saddam Hussein cuando fue ministro de Exteriores de su país, Argelia.
Brahimi efectuó una gira de evaluación en Irak el pasado mes de febrero cuyas conclusiones disgustaron a los miembros de la secta chií, ya que informó de que las elecciones que demandaban no eran posibles en las actuales condiciones.