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MÉXICO, DF.- Urge que los diputados reabran el debate de la iniciativa de Ley sobre Transgénicos, Bioseguridad y Biotecnología, para buscar un acuerdo que amén de impulsar la soberanía alimentaria no ceda a pretensiones de las transnacionales en la materia.
Los diputados federales del Partido de la Revolución Democrática (PRD), Antonio Mejía Haro y Francisco Mora Ciprés, añadieron que en unas semanas Estados Unidos pondrá en vigor la Ley de Bioterrorismo que busca proteger sus fronteras de productos susceptibles de contaminar su mercado y en México aún no contamos con un marco legal al respecto.
En entrevista destacaron que la reforma en el Congreso mexicano debe llenar el vacío legal que ha permitido el saqueo de especies vegetales y animales por parte de empresas farmacéuticas y de alimentos transnacionales, además de la importación de forma ilegal de semillas y alimentos modificados genéticamente a nuestro país.
El secretario de la Comisión de Agricultura, Antonio Mejía Haro, expuso que si bien aún no hay acuerdos concretos entre los grupos parlamentarios, se espera que en breve se pueda avanzar en un dictamen sobre este tema.
“A pesar de que el caso de las vacas locas aún no se resuelve en Estados Unidos y se importan miles de toneladas de alimentos a México que están contaminados o modificados genéticamente con todos los riesgos que significa eso para la salud humana, aún no nos ponemos de acuerdo sobre un marco legal que evite ese tipo de situaciones”, comentó.
Dicha Ley, expuso el legislador por Zacatecas, es parte del paquete de reformas que se busca aprobar de manera urgente para dotar al campo de un marco legal moderno y de una estrategia que dé respuesta a la apertura comercial y a la crisis en la que se encuentra en sector.
Adelantó que uno de los temas a discusión en el dictamen de la citada Ley es el “principio precautorio” que se busca sea una regla de seguridad en el manejo o posible utilización de transgénicos en México para evitar riesgos de contaminación a cultivos o incluso a la salud de los humanos.
Por su parte el diputado federal, Francisco Mora Ciprés, destacó que la citada busca también poner candados a las empresas transnacionales que están saqueando el germoplasma de la flora y fauna mexicana para registrarla como patentes propias.
“No se trata de satanizar a los transgénicos y a la biotecnología, sino impulsarla como una actividad necesaria para garantizar la soberanía alimentaria en México. Pero también cerrar el paso a empresas que están robando semillas, plantas y animales de nuestro país para registrar su germoplasma como un producto propiedad de esas transnacionales”, subrayó.
Lamentó que el vacío legal permita este tipo de saqueo y “piratería genética” en donde diversas variedades de cactáceas del norte de México han sido ya registrado su germoplasma como propiedad de dichas empresas. “Incluso esta misma situación ya se dio con algunas variedades del maíz y fríjol que se cultiva ancestralmente en nuestro país”.
Las reformas frenarán el saqueo de flora y fauna mexicana, buscarán impulsar la biotecnología en México, para que instituciones como la UNAM, IPN y la Universidad Autónoma de Chapingo, registren como mexicanas toda la variedad de especies y continúen con el mejoramiento de variedades de semillas, frutas y ganado, que permitan garantizar la soberanía alimentaria y no depender de empresas extranjeras.