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LIMA, PERÚ.- El encarcelado ex jefe de inteligencia Vladimiro Montesinos reveló que en 1998 él y el entonces presidente Alberto Fujimori se enteraron que Chile preparaba una “guerra preventiva contra el Perú”, pero no dijo para cuándo ni entró en detalles.
Montesinos, quien en la década pasada fue también asesor de Fujimori, hizo la revelación el jueves durante un juicio que encara en un recinto judicial adyacente a una base naval, en el puerto El Callao, por los delitos de peculado y asociación ilícita para delinquir, perpetrados en 1998.
Según segmentos emitidos ayer por el canal cuatro de televisión de Lima, Montesinos dijo al Fiscal Pablo Sánchez que “Fujimori es un hombre hermético y tiene una formación. Él es matemático, es un hombre que habla poco, trabaja mucho, y sí cumple. Bueno, en ese sentido lo he conocido a él”.
“Nosotros logramos hacer una penetración en Chile y pudimos conocer cómo, en ese momento, la fuerza armada chilena preparaba lo que hoy se llama la guerra preventiva contra el Perú, y nosotros teníamos que tomar las previsiones para evitar que nos encontraran en situación disminuida”.
A diferencia de otras ocasiones en que permanecía en silencio durante las audiencias, Montesinos el jueves estuvo locuaz y reflexivo. Montesinos, de 59 años, dijo: “Yo me siento condenado de por vida. Para mí la vida ya terminó a mi edad. Me quedarán diez años más de vida. Tengo ya una condena de 15 años. O sea, yo ya me he condenado a cadena perpetua. Entonces, no tengo ninguna perspectiva hacia el futuro, en nada”.
Añadió que “no tengo ningún interés político, ni ningún objetivo de denunciar a nadie porque no voy a sacar nada. Yo voy a salir de la prisión al cementerio. Esa es mi percepción y así me he preparado como hombre de inteligencia. Entonces, nada. No tengo ningún cálculo político, ni nunca lo he tenido”.
Montesinos, capturado en junio de 2001 en Caracas, está recluido en una prisión de la armada en el vecino puerto El Callao. Encara 74 juicios que van desde narcotráfico, corrupción de funcionarios, y tráfico de armas para guerrilleros colombianos, hasta violación de derechos humanos.
Hasta ahora el ex jefe de inteligencia ha sido condenado a nueve años de cárcel por usurpación de funciones, a ocho por peculado; en dos procesos distintos a cinco, en cada uno, por tráfico de influencias. Ha sido absuelto del cargo de posesión de armas.
El 28 de junio de 2004, en su mayor condena hasta ahora, fue sentenciado a 15 años de cárcel y al pago de una reparación de 50 millones de soles (14.7 millones de dólares), por los delitos contra la administración pública, corrupción de funcionarios, contra la tranquilidad pública y asociación para delinquir.
