La información de inteligencia con la que Estados Unidos sostuvo sus argumentos para acusar a Irak, era equivocada.
17 de septiembre 2004.
Nueva York, (Notimex).- El ex presidente de Irak, Saddam Hussein, tenía la intención, pero no la capacidad para fabricar armas de destrucción masiva, de acuerdo con el borrador de un reporte en la materia que publicó hoy el diario The New York Times (NYT).
El documento sostiene que, según información de inteligencia, Hussein "planeaba producir armas químicas y biológicas", si la presión que Naciones Unidas (ONU) y su proceso de sanciones y monitoreo, se flexibilizaban.
"Esto no hace sino confirmar lo que todos sabíamos, lo que los mismos estadounidenses han dicho y lo que los mismos iraquíes dijeron a la ONU antes de la invasión", dijo este viernes a Notimex un alto funcionario ruso, país que forma parte del Consejo de Seguridad.
El reporte fue preparado por Charles Duelfer, ex subjefe de inspectores de la ONU, enviado después por la Casa Blanca a título nacional a Irak, a buscar armas de destrucción en masa que el primer grupo remitido por el gobierno del presidente George W. Bush no encontró.
Dicho equipo, encabezador por David Kay, concluyó que la información de inteligencia en la que Estados Unidos sostenía sus argumentos para acusar a Irak, era equivocada.
Estados Unidos lanzó en la primavera boreal de 2003 una invasión militar unilateral contra Irak, sustentada en la premisa de que Hussein tenía armas de destrucción masiva.
Unos días antes del inicio de la guerra, Irak informó a la ONU que no tenía armas químicas, biológicas y nucleares. Washington y Londres insistieron entonces que sus servicios de inteligencia tenían información distinta, que meses después, resulto ser falsa.
El informe de Duelfer esta basado en decenas de entrevistas con científicos y funcionarios que trabajaron en el gobierno del presidente Saddam Hussein, y da cuenta de "evidencia especifica" encontrada en laboratorios clandestinos, para preparar armas, según el NYT.
Funcionarios estadounidenses no identificados por nombre, dijeron al diario que la versión final del reporte, y la preliminar, no hará un juicio final sobre los programas armamentistas iraquíes, ni descartaran la posibilidad de que aún pueda haber armas prohibidas en el país.