Montreal, (Notimex).- La canadiense María Houle, de 58 años de edad, deberá enfrentar un proceso judicial por haber ayudado a suicidarse a su hijo Charles Fariala, de 36, quien padecía esclerosis en placas, grave enfermedad del sistema nervioso central.
A la espera del proceso, el juez del caso le otorgó libertad condicional, siempre y cuando recurra a los servicios de un psiquiatra, tras ser acusada este lunes por la Policía de Montreal de haber asistido a su hijo para que se suicidara.
El drama ocurrió el sábado por la noche, cuando la señora Houle llamó a la Policía para señalar que su hijo Charles Fariala, quien padecía la enfermedad incurable y debilitante, se había quitado la vida gracias a la ayuda que ella le proporcionó.
La Sociedad Canadiense de Esclerosis en Placas teme que este caso sea tomado como ejemplo por personas que sufren esa enfermedad, cuyos síntomas son graves e incapacitantes porque puede afectar todas las funciones biológicas, desde el movimiento hasta la memoria.
La asistencia al suicidio es un delito en Canadá, pero es bien sabido que muchos médicos recetan drogas mortales a pacientes en fase terminal que reclaman poner fin a su sufrimiento y cuentan con el asentimiento de sus familiares.
La esclerosis en placas en una enfermedad inflamatoria del sistema nervioso central, incluyendo el cerebro, los nervios ópticos y la medula espinal, y se manifiesta al comienzo de la edad adulta.
