La falta de voluntad política, los motivos partidistas y en algunos casos los intereses provocan que no haya la correcta cloración en el 15 por ciento de los municipios de Durango, de los que han tenido que ser sancionados algunos por conducta reincidente en la escasa atención en este aspecto sanitario, según explica Alejandro Real Martínez, jefe del Departamento de Salud Ambiental de los Servicios de Salud de Durango (SSD).
Aunque dice no recordar los nombres de los municipios que han sido sancionados, porque comenta que no es de su competencia, sí confirma que en algunos casos se han mostrado negligentes en el tratamiento sanitario del agua, que deben clorar, pues la ley los obliga a mantener este producto en buenas condiciones para su consumo en las distintas poblaciones de la entidad.
Lamenta que haya falta de voluntad política en algunos municipios, donde desafortunadamente no se realiza la cloración del agua, debido a que no es un beneficio comunitario que pueda observarse por los ciudadanos, de tal modo que no beneficia a la alcaldía en turno o al partido que representa. Como no se ve en obra, no le hacen caso, dijo.
De todo el estado, el 85 por ciento de los municipios se encuentran con sistema de cloración y los SSD, a través de la Dirección de Regulación Sanitaria, realizan monitoreos del agua en toda la entidad, a través de las unidades médicas.
Las muestras se analizan para saber si existen microorganismos que provengan de coliformes. El informe de los estudios se envía a la Federación y en forma coordinada se realiza una retroalimentación con los organismos municipales operadores del agua, para que determinen las estrategias a seguir.
Los municipios están obligados a clorar el agua a través de sistemas residuales; sin embargo, en los casos donde hay comunidades pequeñas, o que no existe la orografía adecuada para establecer la infraestructura demandada, es necesario que las autoridades implanten las estrategias para que la comunidad tenga agua saludable.
Los sistemas pueden desarrollarse en forma manual o incluso domésticamente. En las comunidades rurales el muestreo se indica a través de los centros de salud, mientras que en las áreas urbanas se realiza en forma aleatoria, directamente en los domicilios de los usuarios.
Gracias al sistema de tratamiento del agua a través de la cloración, se logró controlar el cólera que apareció en México en 1991 y que en Durango ha sido posible su erradicación. La cloración de este vital líquido es un factor de disminución de las enfermedades gastrointestinales.
PURIFICACIÓN
Métodos de cloración
El cloro puede obtenerse del que comúnmente se utiliza para lavar, mientras que la plata coloidal y el yodo pueden adquirirse en alguna tienda de autoservicio. Ahí se indican las instrucciones de uso.
· Pueden aplicarse dos gotas de cloro por litro de agua y dejar reposar por 15 minutos.
· También se aplican dos gotas de plata coloidal y reposo de agua por diez minutos.
· El yodo también es auxiliar para desinfectar el agua.
· Hervir el agua por espacio mínimo de diez minutos.
FUENTE: Investigación de El Siglo de Durango.
