México, DF.- El aumento que aprobó la Comisión Nacional de los Salarios Mínimos (CNSM), de 4.25 por ciento a los minisalarios para 2004, ha quedado rebasado ante la oleada de ajustes que se están dando en servicios como el transporte, predial, gas y agua, dijo el investigador del CAM, Luis Lozano.
El encargado del Centro de Análisis Multidisciplinario (CAM) de la Facultad de Economía de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) explicó que el aumento al transporte de 50 centavos, más los ajustes mensuales en gas y energía eléctrica y otros productos considerados básicos como la carne y el pollo, afectarán el poder adquisitivo de los mexicanos y se acentuará la famosa ?cuesta de enero?.
Explicó que la ciudad de México y la zona metropolitana, donde el salario mínimo alcanzó los 45.24 pesos diarios, será de las áreas más afectadas, ya que se considera además de este incremento en el autotransporte, un alza de 3.9 por ciento en servicios que otorga el gobierno capitalino como el predial, agua, nómina y trámites administrativos diversos.
En entrevista telefónica, destacó que en los tres primeros años del gobierno del presidente Vicente Fox, si bien ha habido una recuperación del poder de compra, éste ha sido insuficiente para revertir la caída de años anteriores.
Recordó que desde 1987 a la fecha, la pérdida acumulada del poder adquisitivo del salario mínimo ha sido de 80 por ciento.
Explicó que debido a que la inflación de 2003 podría ubicarse alrededor de 3.5 por ciento a 3.8 por ciento y a que el incremento a los salarios mínimos al inicio del año pasado fue de 4.5 por ciento, la recuperación del poder de compra es marginal.
Agregó que algunos productos básicos como la tortilla subieron diez por ciento. El 26 de julio -recordó- aumentó el precio de la tortilla de cinco a 5.50 pesos, además de algunos ajustes al huevo, leche, pollo, gas y luz.
No obstante reconoció que el aumento de 4.25 por ciento a salarios mínims para 2004, es mayor a lo que se esperaba, tomando en consideración que la inflación para este año será de tres por ciento.
Lozano afirmó que además de este aumento, las familias mexicanas deben enfrentar las deudas que asumieron el año pasado, como consecuencia de los gastos de las fiestas decembrinas.
Comentó que este aumento le durará a la familia mexicana muy poco, por lo que para tener acceso a una canasta básica, el trabajador y su familia deberá trabajar más para aportar el sustento para su hogar, pero ante una difícil situación en el empleo será casi imposible.
Aseveró que esta restricción constante al consumo, más una tendencia alcista en el desempleo, prevé un panorama oscuro en 2004.