SALTILLO, Coah.- Aun continúan las detenciones arbitrarias de personas por parte de las diferentes policías, tanto del estado como de los municipios, incluso por motivos como ?actitud sospechosa? o ?marcado nerviosismo?, según sus partes informativos, lo que es ilegal y atentatorio contra los derechos humanos, expresó la presidenta de la Comisión de Derechos Humanos del Estado de Coahuila (Cdhec), Miriam Cárdenas Cantú.
?Este es un punto que nos preocupa como Comisión, porque refleja cómo los elementos que pertenecen a los cuerpos policíacos, municipales, estatales o ministeriales, continúan con sus actos de autoridad sobrepasando las facultades que la ley les confiere, en algunos casos por desconocimiento, en otros porque es una práctica habitual que tienen, y ellos creen que hacen lo correcto?.
Dijo que en otros casos de detención arbitraria, a los policías se les desbordan las emociones y son incapaces de controlarlas, y más parece que se desquitan con las personas a las que detienen, que tratar de cumplir con la ley.
Es común que a los detenidos no los pongan a disposición del MP, ni hacen la detención en los supuestos que la ley prevé; es decir, en un acto de autoridad fundado o motivado, sino se trata de un caso urgente de flagrancia, y que después de la detención sea consignado el detenido.
?También es frecuente que se diga en los partes informativos de los policías, que haciendo su recorrido de vigilancia de rutina vieron a una persona de ?actitud sospechosa? o ?con marcado nerviosismo? y procedieron a su detención, pero no hay ninguna flagrancia ni ninguna falta, ni administrativa ni la comisión de algún delito, ni estar nervioso es contra la ley?.
Precisó que la policía al detener a alguien por el sólo hecho de estar nervioso o parecer sospechoso, actúa en contra de un principio de inocencia.
?Se debe detener alguien porque se presume su participación de la comisión de algún delito o falta administrativa, porque se le encuentra en flagrancia, pero no se le debe detener para ver si cometió algo malo?.
Consideró que estas detenciones deben de quedar muy claras, debido a que estamos hablando de la libertad personal que es un derecho humano, y que las autoridades deben respetar las formalidades que las leyes exigen para poder afectarla.
Aseguró que la Cdhec busca abatir el número de detenciones arbitrarias, por lo que
ofrece los cursos de capacitación a servidores públicos, y que se pone un énfasis especial en los policías, a quienes se les enseña qué son los derechos humanos
Indicó que próximamente la Comisión iniciará en todo el estado un curso sobre el uso de la fuerza para la detención de las personas, sobre cómo empatar sus labores (de los policías) y lo que los DH dicen, como por ejemplo la proporcionalidad del acto de fuerza cuando una persona opone resistencia, aunque tampoco, según aclaró, la Cdhec esta en contra de su uso, sino que debe ser proporcional, racional y con ciertas reglas.
HAY ?CIFRA NEGRA? DE DETENCIONES ARBITRARIAS
?Hay una cifra oculta de la mayoría de los casos de violación de DH por parte de las policías, pero no los conocemos todos, es una cifra negra muy grande que no hay manera de medirla porque no se lleva registro en las policías. Es mayor lo que se oculta que lo que se llega a saber?, reveló Cárdenas Cantú.
Dijo que en los informes que requieren a las autoridades, la norma general es negar la violación a los DH y justificar el proceder de las policías, aunque hay excepciones.
Explicó que en los municipios más grandes, por su mismo número de habitantes, hay más violaciones en contra de los DH, pero también hay más control.
?En los municipios más alejados los policías llegan a hacer lo que quieren, por eso buscamos acercarnos a estos lugares no sólo a las ciudades grandes?.
Estableció que es difícil encontrar buena respuesta para el respeto de los DH entre quienes tienen el trabajo diario policiaco, porque siempre buscan justificar sus actitudes arbitrarias..
?Por ejemplo, si un detenido resulta con lesiones, dicen en su parte informativo que la persona se cayó desde su propia altura y que por eso se golpeó?.
Cárdenas Cantú, dijo que afortunadamente por otro lado hay más conciencia entre los alcaldes, directores de seguridad pública y los altos mandos de las policías, por cumplir con el respeto a los derechos humanos de los detenidos.
Citó como ejemplo, que la Procuraduría de Justicia del Estado nombró a una fiscal especial para los derechos humanos, a fin de conocer los casos en que sus agentes u otros funcionarios públicos sean señalados de haber cometido violaciones en contra de los derechos humanos.