En los pasillos del PRI es cada vez más fuerte el rumor de que no habrá convocatoria para la elección de dirigente en el DF, porque nadie ha sido capaz de operar el asunto. Dicen que Roberto Madrazo evaluó ya la situación y que es claro que se está alejando de la dupla formada por María de los Ángeles Moreno y Beatriz Paredes en el DF.
Una de las razones por las que el líder nacional del tricolor ya no está tan seguro de apoyar a Moreno es que le llegó el chisme de que la estructura local no la jugará con él en 2006. Presidentes de distrito y ex presidentes del Comité Directivo del partido, como Roberto Campa, Óscar Levín y Manuel Aguilera, entre otros, han manifestado que no irán con Madrazo.
Ese hecho, aunado a que María de los Ángeles no ha sido capaz de destrabar el pleito que trae con Cuauhtémoc Gutiérrez de la Torre, a pesar de contar con todo el apoyo, es lo que está orillando al tabasqueño a pensar en un cambio de estrategia. En las últimas semanas sus asesores le han comentado que entre la base no es bien visto que entregue el partido en el DF a sus adversarias, Moreno y Paredes, quienes pelearon contra él por la presidencia nacional del PRI hace un par de años. Además han notado que ambas mujeres van por todas las canicas no sólo en el DF, que era el trato original, sino que Beatriz no se ha descartado como candidata presidencial.
Aunado a ello está el sentir de los presidentes de distrito que se la jugaron con Madrazo en la elección interna anterior y que, de llegar María de los Ángeles, temen sufrir su venganza. Sus hombres de confianza aconsejan a Madrazo dejar que corra el tiempo y después exigir que le permitan poner a un delegado propio del partido en el DF, con el argumento de que él ya firmó dos convocatorias, dio todo el apoyo a Moreno y ni así fue capaz de sacar un acuerdo.
Algunos pensaron que haciendo mancuerna con Jorge Schiaffino, María calmaría a las bases, pero fue todo lo contrario, pues su pareja no es bien vista por nadie en el PRI capitalino, y menos después de la evidente torpeza política que mostró como delegado en Morelos, donde incluso olvidó registrar candidatos y el PRI no pudo participar en varios municipios. Por ahí va el asunto, Madrazo prepara el manotazo para que llegue un dinosaurio al DF que meta orden y le permita sacar bien la elección de su candidatura presidencial en 2005.
Centavitos...
Parece que Andrés Manuel López Obrador impuso su horario provinciano a la ciudad y muy pocos se han dado cuenta, pues se levanta muy temprano, cuando la mayoría de los capitalinos aún duerme y obliga a la prensa a madrugar. Come en su casa y se echa una siesta, como se acostumbra en su pueblo, cuando la mayoría de los que obligó a desmañanarse siguen trabajando.
Todo indica que Andrés Manuel no es tan chambeador como dicen, sino que trabaja con horarios de su pueblo en esta gran ciudad y pasa buena parte del tiempo gobernando desde su casa, a control remoto. Por ejemplo, el lunes, cuando Marcelo Ebrard lo buscó para llorar en su hombro no lo pudo localizar y el ex titular de la SSP tuvo que hablarle a Alejandro Encinas, quien le dijo que “El Peje” estaba en su casa, seguramente durmiendo la mona...
Por cierto, dicen que cuando se oficializó la destitución de Ebrard, se puso tan mal que los perredistas de la ALDF buscaron esconderlo de la prensa. Sopesaron incluso la posibilidad de sacarlo por alguna puerta lateral o por la azotea del inmueble, pero no pudieron y lo más que lograron es que las mujeres salieran por delante para abrirle un poco de cancha.