Asegura que el proceso judicial del predio El Encino estuvo plagado de irregularidades y omisiones en la comprobación de datos.
03 de junio 2004.
MÉXICO, D.F., (SUN-AEE).- Andrés Manuel López Obrador, jefe de gobierno del Distrito Federal, presentó pruebas documentales para fundamentar que el proceso judicial del predio El Encino estuvo plagado de irregularidades, con información falsa de la parte acusadora y omisiones en la comprobación de datos del Ministerio Público Federal.
En la segunda clase del seminario-taller sobre "La manipulación de la ley con propósitos políticos", adelantó que las pruebas serán presentadas este mediodía ante la Procuraduría General de la República (PGR), para que la autoridad federal actúe en consecuencia.
Además, solicitará a la Secretaría de la Reforma Agraria (SRA) información sobre el predio ubicado en Santa Fe, ya que hay un antecedente de que fue solicitado para su enajenación por cuatro particulares en 1934.
Apoyado con diapositivas y rotafolios con copias de escrituras, folios de las mismas y el amparo que interpuso Federico Escobedo, entre otros documentos, funcionarios del gobierno capitalino presentaron cinco pruebas que presuntamente evidencian que los dueños del predio El Encino, en Santa Fe, mintieron.
En primer lugar, expusieron que el amparo revela que presentaron copias de una escritura del predio en disputa de 1991, que acredita 86 mil 968 metros cuadrados, y más adelante fundamentan con otro documento una extensión superior a 100 mil metros cuadrados.
Sin embargo, el gobierno presentó pruebas de que en 1998, con copias de otra escritura del mismo lugar, Federico Escobedo a través de la empresa Promotora Internacional Santa Fe, le vendió a la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (STC), más de 3 mil metros cuadrados para la construcción de la autopista México-Toluca.
Con lo anterior se podría demostrar una contradicción, pues además de que no se presentó la escritura con la extensión real, el Ministerio Público Federal, Carlos Cortés Barreto, no solicitó copias al Registro Público de la Propiedad, a pesar de que por la fecha de la escritura se podrían presumir cambios en dicha superficie.
Aunado a ello, López Obrador resaltó que además de Escobedo, Mayolo Soto y Nemesia Ledezma Rubí, han asegurado ser los legítimos dueños y con base en un plano de 1934, se pudo conocer que cuatro personas solicitaron la enajenación de predios baldíos propiedad de la nación, donde se ubica El Encino.
López Obrador confió en que estas pruebas servirán a la PGR para demostrar su inocencia y también dijo esperar que el proceso de desafuero quede suspendido, pues ante todo debe prevalecer la ley y una actitud de rectitud.
Adelantó que en la sesión de mañana se hablará sobre las pruebas que se utilizaron para que la autoridad federal resolviera que él era responsable, mientras que el lunes tocará el tema sobre si hay elementos que acrediten su culpabilidad y finalmente el martes se darán las conclusiones del seminario- taller.
