Buenos Aires, (EFE).- Un hombre de 30 años que estaba detenido en una comisaría del norte de Argentina enjabonó su cuerpo para huir por entre los barrotes de su celda, pero las autoridades frustraron su fuga al capturarlo cerca de la sede policial.
Al comentar el curioso método para escaparse utilizado por Luis Aguilar, la prensa de Buenos Aires precisa que el hombre había sido detenido por ebriedad y por haber intentado agredir a un policía en la periferia de la capital de la provincia de Salta.
Fuentes policiales indicaron que Aguilar consiguió convencer a otros detenidos para que le ayudaran a fugarse y, tras desnudarse y untar su cuerpo con jabón, logró pasar entre los barrotes de hierro de la celda.
Primero pudo sacar la cabeza, luego un brazo y una pierna, mientras que el resto de su cuerpo lo pasó con la colaboración de sus compañeros de cárcel.
Aguilar tuvo tiempo para vestirse, aunque no para calzarse, y se escapó de la comisaría sin ser advertido.
Pero los gritos de algarabía de los detenidos alertaron a los policías, quienes montaron un operativo en las inmediaciones de la sede policial, lograron capturarlo muy cerca de la comisaría y lo alojaron en un calabozo sin barrotes.