Buenos Aires, (EFE).- Una argentina denunció a un gimnasio que le quería cobrar más dinero de lo que establecía la cuota mensual por "ser gorda", según informó el diario Clarín.
La mujer, que pesaba 121 kilos, denunció en una comisaría que la propietaria del gimnasio le dijo que la cinta aeróbica no iba "a soportar" su peso y que por eso debía pagar una cuota más alta que el resto de los clientes.
"Salí del gimnasio llorando. No podía creer lo que me estaba diciendo" la propietaria, expresó Mónica Rojas, de 39 años.
El médico de la mujer le había recetado una dieta y que practicara ejercicios para bajar de peso, por lo que decidió ir a averiguar a un centro de la ciudad costera de Mar Del Plata, donde vive.
"Fui al gimnasio porque me lo recomendó mi médico, ya que tengo hipotiroidismo y diabetes tipo 2", explicó la mujer.
La mujer aseguró que ha logrado bajar seis kilos en su peso gracias a la dieta y los ejercicios que hace en otro centro deportivo, donde puede caminar por la cinta aeróbica y usar el resto de las instalaciones sin ningún problema, y sin coste extra.
