Los bajos niveles de inversión y ahorro generan una recuperación poco duradera, señalan analistas.
Agencias
FILADELFIA, EU.- Dados los bajos niveles de ahorro e inversión productiva en el país y las pocas perspectivas de una aceleración en su crecimiento, no se alcanza a vislumbrar una recuperación sostenida y duradera para finales del sexenio, estimó Alfredo Coutiño, director del Centro de Pronósticos Económicos para México.
“Desafortunadamente, la recuperación actual de la economía mexicana se explica por la ‘inercia externa’ (expansión de los Estados Unidos y alto precio del petróleo) más no por fuentes internas”, advirtió.
Explicó que dadas las pocas probabilidades de una profundización de la Reforma Económica en el país en los próximos dos años, y la incapacidad de la economía para generar ahorro interno, se prevé que los niveles de inversión en lo que resta del sexenio no serán suficientes para impulsar una mayor recuperación, por lo que la capacidad potencial de crecimiento estará limitada a un máximo de 4.5 por ciento para 2006.
“Con base en el Modelo de Pronósticos de Alta Frecuencia (MPAF) podemos afirmar que la economía creció 3.7 por ciento en el segundo trimestre del año...”, dijo, “la economía registrará un crecimiento de 4.1 por ciento para todo el presente año”.
“La presente información del PIB y las estimaciones trimestrales están basadas en nuestro Modelo de Pronósticos de Alta Frecuencia (MPAF) que incluye información observada sobre actividad productiva, mercados financieros, precios de los futuros y forwards hasta el mes de junio”, detalló.
Prevalece desigualdad
Por su parte, un estudio de la Comisión Económica para América Latina señala que esta región podría registrar este año un crecimiento económico de alrededor de cuatro por ciento, aunque seguirá siendo la región más desigual del mundo.
Al participar en el seminario “Financiamiento para el Desarrollo”, organizado por la Fundación Colosio, la representante en México de ese organismo, Rebeca Grynspan habló sobre la situación que enfrenta la región.
Existe una gran concentración del crédito, no hay capital de riesgo, aunado a una insuficiente regulación, una banca de desarrollo debilitada y el gran problema de las pensiones que enfrentan todos los países del continente, detalló.
Mientras en Estados Unidos 50 por ciento del financiamiento para las pequeñas y medianas empresas proviene de la banca, en América Latina sólo dos por ciento obtiene crédito por este medio.
América Latina ha estado afectada, además, por la gran volatilidad de los capitales externos, pues en la actualidad se requiere más financiamiento que en el pasado para alcanzar los mismos niveles de crecimiento.
Para crecer, dijo, hay que invertir, pero se está invirtiendo poco en la región, por abajo de 20 por ciento, mientras que en los países asiáticos supera 30 por ciento. Por su parte, el director de análisis del sistema financiero del Banco de México, Pascual O`Doherty habló la escasa participación de la banca en el financiamiento a las empresas.
Comentó que la banca sólo intermedia la mitad de los recursos que media el sistema financiero mexicano, donde han cobrado importancia las sociedades de inversión, las siefores y las sofoles.
PETROPRECIOS SIN CONTROL
Los precios de petróleo alcanzaron ayer un nuevo máximo histórico tras el ataque de Estados Unidos para sofocar una rebelión en la ciudad iraquí de Nayaf, la caída en las reservas de crudo en la Unión Americana y las recientes declaraciones de Hugo Chávez. El crudo liviano estadounidense se cotizó hasta en 45.75 dólares el barril, el precio más alto en 21 años del mercado de Nueva York, antes de cerrar a 45.50 dólares, con alza de 70 centavos respecto a un día anterior. Los futuros del crudo Brent de Londres treparon hasta 42.56 dólares el barril y cerraron a 42.29, con alza de 72 centavos (Archivo).
