San Pedro, Coah.- La espera terminó. Los menores infractores ya están en su nuevo hogar: La Residencia Juvenil de La Laguna. Para los 33 niños y adolescentes, el albergue reconforta su internamiento. Ahora sigue la etapa de certificación de todo el personal, para lograr la atención, tratamiento y adaptación de los jóvenes en situación extraordinaria.
Conocedor de las condiciones en que operaba la antigua Residencia Juvenil en el ejido San Luis, el segundo Visitador de la Comisión de Derechos Humanos del Estado de Coahuila (CDHEC), David Omar Sifuentes Bocardo, manifestó un cambio total en la forma de vida de los internos.
“Esperamos que el nuevo edificio se complemente con capacitación encaminada a la sensibilización del personal que tendrá contacto con los menores ”, dijo Sifuentes Bocardo.
Al respecto, el subsecretario de Prevención y Readaptación Social, Jorge Luis Morán Delgado, destacó el cambio radical en la atención a los jóvenes infractores de los cinco municipios de la Comarca Lagunera de Coahuila.
Sobre la capacitación dijo que con la inauguración de la Residencia Juvenil de La Laguna, el personal recibirá cursos encaminados a la certificación de su trabajo en la Instituto Superior de Estudios de Seguridad Pública del Estado, con sede en el ejido San Miguel de Matamoros, Coahuila.
“Este no es un pequeño Cereso, no hay bardas altas ni torres, hay aulas y talleres que permitirían a los adolescentes internados, conocer un nuevo concepto de la vida y lograr una verdadera adaptación a la sociedad”, mencionó Morán Delgado.
“El cambio fue sin precedentes”, dijo Gabriela Estavillo Flores titular del Consejo Unitario de Menores (CUM), quien citó que la antigua Residencia Juvenil resultaba insuficiente y que desde hace ocho años fue ocupada eventualmente pero la estancia se prologó.
Encargada de hacer las funciones similares a una Juez Penal pero en el rubro de los menores infractores, Estavillo Flores opina que el mayor acierto se encuentra en la habilitación de talleres. “Los menores necesitan conocer una actividad que les permita ganarse la vida, ser productivos, con el fin de que se alejen de las acciones delictivas”.
La titular del CUM calificó la existencia del nuevo inmueble equipado, como factor motivacional para el personal y de entusiasmo a los menores: “Tuve la oportunidad de hablar con los niños, estaban muy contentos, le agradó que el Gobernador hablara con ellos el día de la inauguración”.
La obra completa tuvo una inversión de diez millones de pesos y se encuentra a la vanguardia de las instituciones dedicadas a la atención integral de menores que por diferentes situaciones adoptaron conductas calificadas como delictivas en los códigos penales.
