Hay más de 40 especies de plantas que pueden desencadenar reacciones alérgicas, entre ellas están el maíz, epazote, quelite, fresno, cedro, trueno, olivo, dulce de alegría.
La rinitis alérgica y el asma son dos problemas originados por una alergia que se agrava en la época de primavera y afectan en especial a las personas que reaccionan negativamente ante la presencia en el ambiente de polen de diferentes plantas como pastos o árboles.
Y es que durante la primavera existe mayor cantidad de pólenes y éstos, al viajar en el aire, pueden causar reacciones alérgicas hasta en 20% de la población.
Un problema especial es la rinitis alérgica, una reacción inflamatoria en el tejido que recubre la nariz por dentro y que se presenta debido a alergia a diversas partículas que pueden ser transportadas por el aire: pólenes, polvo, caspa de animales y mohos.
En lugares como México el asunto se agudiza, ya que hay más de 40 especies de plantas que pueden desencadenar reacciones alérgicas, entre ellas están el maíz, epazote, quelite, fresno, cedro, trueno, olivo, dulce de alegría, cresta de gallo, altamisa, ajenjo, girasol, pasto Jonson, avena loca, zacate criollo, oyamel, huizache, arce, cedro blanco, ocote y pirul, según explica la doctora Rosario Canseco.
Hay una razón científica: los granos de polen son estructuras microscópicas que pueden infiltrarse en el tracto respiratorio humano y generar en el cuerpo una reacción de hipersensibilidad.
MUESTRAS DE DEBILIDAD
Los síntomas que generan estos agentes, a partir de la alergia, son: nariz suelta o congestionada, oídos tapados, descarga retronasal, párpados hinchados, disminución del olfato, ojeras; comezón en los ojos, nariz, garganta o boca; dolor de cabeza, lagrimeo y estornudos.
Las personas que padecen asma, por ejemplo, pueden sufrir también de falta de aire, jadeo, tos y opresión en el pecho.
La especialista recuerda que el asma es una enfermedad crónica inflamatoria de las vías respiratorias que afecta a niños desde muy temprana edad. "Se estima que 30% de los niños sufren de asma en América Latina, y cada vez con mayor frecuencia se registran casos en infantes menores de cinco años", explica.