EFE
ESTAMBUL, TURQUÍA.- Los líderes de la OTAN llegaron ayer a Estambul para una cumbre de dos días que pretende inaugurar un nuevo entendimiento entre europeos y estadounidenses respecto a Irak y reforzar el papel de la Alianza en la lucha mundial contra el terrorismo, especialmente en el frente de Afganistán.
Convocada hace dos años para dar la bienvenida a siete nuevos miembros del Este -Letonia, Lituania, Estonia, Eslovenia, Eslovaquia, Rumanía y Bulgaria-, la cumbre atlántica de Estambul aparece dominada por la cuestión iraquí, a tan sólo dos días del traspaso del poder de la coalición liderada por EU al nuevo Gobierno interino.
“La comunidad internacional se está uniendo respecto a Irak”, aseguró ayer un portavoz de la Alianza.
Los veintiséis aliados harán pública hoy lunes una declaración sobre Irak en la que responderán positivamente a la petición de ayuda formulada por el designado primer ministro iraquí, Iyad Allawi, aunque sin especificar las modalidades.
Allawi solicitó hace una semana la ayuda de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) principalmente para adiestrar a las nuevas fuerzas de seguridad iraquíes, pero también “ayuda técnica” de otro tipo que no quiso especificar.
Los Aliados, fuertemente divididos hace apenas un año sobre el conflicto iraquí, necesitarán más tiempo para definir unas modalidades de asistencia con las que puedan sentirse cómodos tanto los 16 aliados que tienen tropas en Irak como los que se negaron a enviarlas o, caso de España, las han retirado hace poco.
En Estambul se espera igualmente que los jefes de Estado o Gobierno anuncien el reforzamiento de la misión de la OTAN en Afganistán, principal escenario desde los atentados del 11 de septiembre de 2001 de la lucha internacional contra el terrorismo.
La Alianza dirige desde el año pasado la Fuerza Internacional de Asistencia a la Seguridad en Afganistán y se ha comprometido, a instancias de la ONU, a reunir las tropas y medios necesarios para extender la protección de la Fuerza Internacional de Asistencia a la Seguridad de Afganistán (ISAF, por sus siglas en inglés) fuera de la capital, Kabul.
El comandante supremo aliado para Europa, el general estadounidense James L. Jones, consideró esta semana que se necesitarán unos dos mil hombres para la expansión de la misión de la ISAF, incluyendo un batallón de 800 hombres que será desplegado sólo durante las elecciones generales previstas en septiembre.
El presidente del Gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, que participa en su primera cumbre aliada, anunciará hoy lunes, según dijeron fuentes oficiales, que España está dispuesta a “reforzar limitadamente” la cooperación con el Eurocuerpo y la misión de Asistencia a la Seguridad en Afganistán (ISAF, por sus siglas en inglés) pero que no comprometerá aportaciones concretas hasta que sea consultado el Parlamento.
Mañana martes, el presidente afgano, Hamid Karzai, intervendrá ante el Consejo de Cooperación Euro-atlántico, que reúne a todos los aliados con la mayoría de las repúblicas ex soviéticas del Cáucaso y Asia central.
El secretario general de la OTAN, el holandés Jaap de Hoop Scheffer, tiene la intención de lanzar en esta cumbre un amplio debate sobre cómo mejorar los mecanismos de la Alianza para la generación de las fuerzas destinadas a operaciones militares.
Scheffer quiere evitar en lo sucesivo tener que “mendigar” tropas y medios entre los estados miembros, como ha ocurrido con esta primera fase de la expansión de la ISAF.
Los ministros de Defensa de los Veintiséis debatieron ayer por la tarde una propuesta de la Alianza según la cual al menos un 40 por ciento de las fuerzas terrestres de cada país debería poder ser “desplegable” y un ocho por ciento de ellas estar “disponibles” en todo momento para operaciones militares bajo mando de la OTAN.
Los líderes aliados también tienen previsto reforzar en esta cumbre sus acuerdos de cooperación con países terceros.
Por primera vez, ofrecerán a los países del Golfo Pérsico un diálogo permanente en asuntos de seguridad y defensa, y elevarán el rango de su relación con los siete vecinos del norte de África y el Mashrek (Marruecos, Mauritania, Túnez, Argelia, Egipto, Israel, Jordania).
