Torreón, Coah.- Instituir la colegiación como una medida obligatoria para quienes ejercen la abogacía, podría llegar a satisfacer la necesidad de salvaguardar la profesión y serviría para que la sociedad recobre la confianza hacia dichos profesionistas.
Alfredo Miranda Castillo, presidente del Colegio de Abogados de La Laguna, Asociación Civil (CALAC) indicó que se requiere una minuciosa revisión a la regulación para las asociaciones de abogados, entre sí y con otros profesionales, de tal modo que sus miembros ofrezcan servicios especializados de manera coordinada en beneficio del cliente.
Al conmemorarse ayer el Día del Abogado, expresó que es bueno sacar a relucir los datos históricos sobre la primera cátedra que se impartió y la institucionalización de la fecha en sí, pero resulta más significativo abordar los temas que están estrechamente relacionados en la actualidad, con el ejercicio de la profesión y su relación con la sociedad.
Miranda Castillo reconoció que el cliente, muchas veces no quiere verse obligado a demandar al abogado cuando se siente defraudado en sus intereses, lo que ha obrado en demérito de la profesión.
En el ámbito nacional y Coahuila en específico, es evidente la creación de muchas leyes nuevas y modificaciones a las ya existentes que han servido para estar actualizados y contar con una legislación adecuada a las necesidades actuales.
En la entidad se creó recientemente la Ley Estatal de Arbitraje Médico y su correspondiente Comisión Estatal que se encargará de vigilar su aplicación, con el propósito de sancionar las irregularidades que se den en la relación médico-paciente.
Del mismo modo, existen instancias como la Procuraduría Federal del Consumidor para regular las relaciones comerciales entre proveedores y clientes; la Comisión Nacional para la Defensa de Usuarios de los Servicios Financieros (Condusef) para conciliar y arbitrar los casos entre las instituciones financieras y sus clientes, así como la Comisión Nacional de Seguros y Fianzas.
Sin embargo, no existe hasta ahora en nuestro país, una instancia que regule y sirva también como conciliadora y árbitro en las relaciones de los abogados y sus clientes, lo que ha facilitado la permanencia de pseudo profesionistas que engañan a la gente y por lo tanto, que la abogacía se haya desprestigiado.
El CALAC formuló la propuesta de la colegiación obligatoria, pues se considera que la inmensa mayoría de quienes ejercen la profesión no están afiliados a ningún colegio; a la vez, existen agrupaciones que sólo salen a relucir en tiempos preelectorales y que sirven como peldaño político para sus integrantes.
Una opción
Una verdadera profesionalización de la carrera policial, podría contribuir a la ocupación de cientos de abogados que están desempleados y que además tienen una vocación por la justicia.
A consideración de Jesús Antonio Rodríguez Galindo, encargado del comité de Vigilancia del Colegio de Abogados de La Laguna, Asociación Civil, los cuerpos policíacos deberían modificar los esquemas de preparación de elementos que están aplicando, pues un año en las academias de policía no es suficiente para cambiar la mentalidad de quienes ingresan y fomentarles una vocación de servicio.
Sin embargo, si se reclutaran a licenciados en Derecho, para especializarlos en áreas como la Criminalística, los resultados en el desempeño de las corporaciones serían mucho más positivos, pues quienes tienen vocación por las leyes también la tienen hacia la justicia y la seguridad.
En la Región Lagunera existen siete instituciones de educación superior que imparten la carrera de Derecho, de las que anualmente egresan poco más de 200 abogados, aunque un porcentaje muy bajo logra desempeñarse como litigante y otro porcentaje aún menor, está afiliado a las agrupaciones de profesionistas.
