EL SIGLO DE TORREÓN
Torreón, Coah.- Alrededor de 100 casas de las colonias Eduardo Guerra, Narciso Mendoza y otras cercanas a las vías del ferrocarril, han sufrido daños por los constantes movimientos de las máquinas y la instalación de vías más cercanas a la barda que las divide.
Vecinos de la calle “J” de la colonia Eduardo Guerra, manifestaron que los problemas comenzaron hace cerca de un año y medio, cuando Ferromex instaló en ese sector los patios de maniobras, para lo cual colocó cuatro vías más cercanas a las fincas, la última de la cual quedó a escasos cinco metros de la barda que colinda con sus fincas.
En mayor o menor medida, la mayoría de las casas acusan el constante paso de las máquinas, ya que tienen cuarteaduras tanto en la sala, cocina y recámaras, aunque en algunas son más notorias, como en la casa marcada con el número 912 de la calle Del Ángel, en la colonia Narciso Mendoza.
Arnulfo Rojas, uno de los quejosos, manifestó que cuando comenzaron los problemas, acudieron a la Presidencia Municipal y se entrevistaron tanto con el secretario del Ayuntamiento, Alfonso Tafoya Aguilar, como con el director de Atención Ciudadana, Carlos Bracho González, pero no lograron nada en concreto.
“Sí vinieron hacer reparaciones según esto, por parte de Ferromex, pero de nada sirvieron, pues sólo echaron mezcla en las grietas que de poco ayuda, como si el daño fuera superficial”.
Lo peor de todo, señalaron, es que el representante de la empresa Ferromex, Carlos Camacho, les manifestó que ni se van a retirar ni van a comprar las viviendas más cercanas, hagan lo que hagan los afectados.
Hace unas cuatro semanas, recordaron, se descarriló un carro con tolva y a punto estuvo de causar una desgracia de proporciones mayúsculas, sólo que no se volcó, pues de hacerlo, hubiera caído sobre una o dos casas pegadas a la barda.
Tras indicar que los afectados interpondrán demandas por daños y perjuicios contra Ferromex, dieron a conocer que ya solicitaron incluso la intervención de la Presidencia de la República, instancia que los canalizó a las áreas correspondientes.
Aunado a los daños a las fincas, destacaron que el ruido algunas noches es insoportable con el constante movimiento de los carros que despiertan a la gente y no permiten conciliar el sueño.
